Balance positivo para la división de fincas exclusivas de Engel & Völkers en el primer trimestre del año. La inmobiliaria líder en intermediación de activos de alto standing ha vendido dos propiedades únicas, ubicadas en Cáceres y Ciudad Real, por un valor total de cinco millones de euros a un cliente latinoamericano y otro español.
La extremeña es una finca de recreo con bodega, cuadra y piscina de 12 hectáreas de terreno. La vivienda tiene una superficie construida de 1.120 metros cuadrados distribuidos en 10 dormitorios y seis baños. Por su parte, la propiedad de Ciudad Real consta de explotación agraría con granero, almacén de grano y bodega con una superficie de 5.107 metros cuadrados de terreno. La casa palacio de esta finca, de 3.804 metros cuadrados, tiene 10 dormitorios y cinco baños.
Diversificación hacia activos de gran prestigio
En noviembre de 2016, Engel & Völkers dio un paso más en su diversificación al abrir la división fincas exclusivas en España. “Entramos en el mercado de fincas y casas señoriales para ofrecer a nuestros clientes unos activos de gran prestigio que son, además, muy interesantes para los inversores”, señaló Christian Völkers, CEO y fundador de la compañía.
Desde finales de 2018 hemos observado una creciente demanda de inversores nacionales e internacionales por este tipo de producto, con una clara preferencia de los clientes por la localización, donde priman aquellas fincas cercanas a grandes capitales, y la buena comunicación tanto aérea como terrestre”, afirma Óscar Larrea, director general de Engel & Völkers Madrid y responsable de fincas exclusivas para toda España.
La división, que tiene su centro de operaciones en el Market Center (MC) de Engel & Völkers en Madrid, cuenta en la actualidad con cinco asesores especializados y más de 50 propiedades en cartera que incluyen fincas vinícolas, ecuestres, agrícolas, ganaderas, de caza y de recreo muy representativas de Madrid, Castilla La Mancha, Castilla León, Extremadura y Andalucía (Sevilla, Córdoba, Cádiz y Huelva), a las que se unen un segmento de casas históricas, monasterios o castillos que pueden ser transformados en una segunda residencia única. El rango de precios de todas ellas se sitúa entre los 500.000 euros y los 50 millones de euros.