Mercedes Camacho
Ciudad Real
El párroco de Santiago, Enrique Galán, pronunció ayer un interesante pregón, con motivo del IV Centenario del Cristo de la Caridad, en la que aprovechó para hacer un llamamiento a las cofradías a que sigan potenciando su vida interior y cristiana.
Tras iniciar su pregón, que no fue al uso y muy distinto de los tradicionales de las hermandades, agradeciendo al Señor los cuatro siglos de existencia de la cofradía del Cristo de la Caridad, hizo un recorrido histórico por lo que supuso el siglo XVII para España y para la Iglesia, recordando a distintos personajes y analizando lo que entonces era la presencia de las cofradías.
Continuó el sacerdote con una mirada al presente, a este 2012 en el que, como recordó, hay importantes hitos para la Iglesia como el Sínodo de la Evangelización, el Año de la Fe, el Doctorado de San Juan de Ávila o el Plan Diocesano de Pastoral centrado en la transmisión de la fe en la familia y la juventud.
Finalmente, Galán quiso soñar con el futuro de lo que deben ser las hermandades en el futuro y se refirió, además de a potenciar su vida cristiana, a aspectos como centrarse en la alabanza al Señor y el amor al prójimo; ejercer una caridad auténtica; preocuparse por la formación cristiana de sus hermanos; aprovechar los espacios formativos de la parroquia; no tener dobleces ni engaños y estar en comunión sincera con el resto de cofradías o cumplir los estatutos con fidelidad, entre otros.
