Esperanza López Solanilla es una puertollanera que ha trabajado durante 41 años como bióloga, fundamentalmente en temas relacionados con el agua. Para una mujer que procede de una ciudad donde el agua es su seña de identidad a través de su emblemática Fuente Agria, este reconocimiento que recibe este 31 de mayo, de la mano de la Junta de Castilla-La Mancha en el acto principal del Día de la Región, como Hija Predilecta, le llega también por su capacidad innovadora en la gestión sostenible del agua y su compromiso con el medioambiente.
Nacida en Puertollano en el año 1959 estudia en el colegio Inmaculada Enpetrol, posteriormente realiza el bachillerato en el Instituto Fray Andrés donde comienza a decantarse por su futuro profesional, la biología. Una vez terminados estos estudios se traslada a Madrid para continuar sus estudios en la Facultad de Biología de la Universidad Complutense y realiza su tesina en el departamento de morfogénesis celular, luego sigue trabajando en el campo del agua donde ha desarrollado gran parte de su trayectoria profesional.
Una trayectoria que ha llevado a cabo tanto en el campo privado como en el público en Ciudad Real como jefa de planta potable, de planta de aguas residuales, jefe de producción, adjunta a dirección regional en temas de tratamiento de agua y en la etapa final como directora de zona en Ciudad Real en Infraestructura de Agua de Castilla-La Mancha. Además, ha tenido relación con la docencia impartiendo ponencias en varios máster de la UCLM o dando clases de control de legionelosis, “siempre relacionado con el tratamiento del agua tanto potable como residual, a eso es a lo que me he dedicado fundamentalmente”, apunta.
Todo su trabajo y su capacidad innovadora le ha hecho valedora este 2025 del reconocimiento como Hija Predilecta de Castilla-La Mancha, “es todo un orgullo, un reconocimiento no solo a mí, también para la gente con la que he trabajado, al trabajo desempeñado en el sector del agua, fundamental para la salud, para la protección del medioambiente y el desarrollo económico, un trabajo que he hecho siempre en poblaciones de Castilla-La Mancha, me hace muy feliz recibir este reconocimiento de mi región”, indica tras salir su nombre como una de las Hijas Predilectas de esta región en 2025.
No obstante, Esperanza López es consciente de que el agua es “imprescindible para la vida, los procesos de tratamientos son muy interesantes desde el punto de vista de poder hacer el agua potable, necesita eliminar contaminantes, hacerla segura para el consumo humano y en el caso de las aguas residuales no se pueden devolver al medioambiente sin tratar” y continúa afirmando cuando habla de un tema que le apasiona, “el agua es única, no hay dos tipos de agua, es un único ciclo hidrológico, el agua que vertemos a los ríos tarde o temprano la vamos a volver a reutilizar”, por lo que tras esta afirmación quiere transmitir a toda la sociedad la importancia de una buena gestión del agua cada día y a cada segundo.

Que la gente se vaya concienciando
Todo un proceso en el ciclo integral del agua que los ciudadanos deben tomar conciencia de la importancia de este líquido para nuestra vida, “yo creo que poco a poco la gente se va concienciando, sobre todo desde edades más tempranas, para que comprendan el tratamiento y los gastos que supone así como la distribución de la misma, no es solo abrir el grifo, hay un largo y costoso proceso detrás, muchas infraestructuras y mucho trabajo que hacer”, indica.
En todo este entramado del agua los ciudadanos tiene que tomar conciencia de la importancia de este bien preciado, pero también afrontar nuevos retos, sobre todo en aquellas zonas donde los ciclos de sequía se hacen cada vez más pronunciados, “hay que optimizar, reducir las pérdidas de agua en redes, distribuir correctamente las aguas para su uso y, sobre todo, no desperdiciar”, una de las palabras claves en materia de agua, “desde los hogares hasta en las infraestructuras, cada uno tiene que ser consciente que el agua es un bien escaso, el agua hay que cuidarla”.
Esperanza López ha participado en estudios y publicaciones científicas para poner en marcha tratamientos e instalaciones nuevas, todo ello para “estudiar e intentar innovar y aplicar tratamientos al agua, cómo oxidar hierro y manganeso con dióxido de cloro, por qué se forma el biofilm en las redes de distribución de agua potable” son algunas de estos estudios científicos que López Solanilla ha realizado a lo largo de su trayectoria profesional.
En cualquier caso, Esperanza López transmite a la ciudadanía que tienen que ser conscientes de que el agua es un bien precioso y es imprescindible para la vida, se debe cuidar y conocer todo el trabajo que hay detrás de la apertura de un simple grifo y que todo este trabajo se valore porque “el agua, aunque llueva, tiene un coste” y este coste asegura que hay que pagarlo, “no digo que cueste más, solo que se pague realmente por el precio que tiene” y sobre todo, que se valore, se valore mucho.