Asamblea Feminismos Ciudad Real ha mostrado públicamente en un escrito su satisfacción tras conocer la sentencia del Tribunal Supremo que condena a 15 años a cada uno de los cinco violadores de la denominada ‘manada’ de Pamplona, por entenderla, aunque un poco tardía, «justa, equitativa y una victoria de la lucha feminista que desde el primer momento creyó a la víctima y la apoyó con sus reivindicaciones».
A su juicio, la sentencia, que reconoce que hubo una agresión sexual sobre la víctima, «es un acto de reconocimiento, de justicia y respeto hacia las mujeres, de incidir en la defensa de la libertad y la seguridad que merecemos frente a las continuas actuaciones machistas en forma de agresiones sexuales, físicas y verbales que sufrimos las mujeres tanto en el entorno público como en el privado».
Para Feminismos «esta conquista en la justicia nos hace dar un paso más en la defensa de los derechos que tenemos las mujeres a sentirnos libres, a vivir sin miedo y en igualdad en cualquier espacio y entorno».
La organización destaca en el escrito el «empuje» del movimiento feminista que, desde el primer momento salió a gritar a las calles ‘hermana yo si te creo’ y se convirtió «en la manada protectora de ésta y de todas las mujeres víctimas de violencia sexual, hasta conseguir parar los pies al machismo que ejerce su continua aparición en forma de violencia ejercida por la fuerza bruta de inadaptados e incapaces sociales».
Con esta sentencia, argumenta, el Tribunal Supremo «se acerca a la sociedad, a sus demandas, a sus necesidades y a sus reivindicaciones».
La asamblea también espera que el fallo «sirva para disuadir a las manadas que actúan en todos los rincones del país», así como sea un revulsivo que incida en «la educación de los jóvenes para que sean conscientes que la libertad es inherente a la persona, que no deben limitar la libertad de las chicas para conseguir sus deseos y nunca volcar sus frustraciones sobre ellas en forma de ‘autoridad’ de cómo, por dónde, de qué manera y con quién deben o no pasear».
También se muestran preocupadas por las reacciones no favorables a esta sentencia, «como se viene escuchando por parte de los representantes políticos de grupos extremistas, quienes entienden que ‘se nota que es una sentencia dictada por la turba feminista supremacista” o que «la relación más segura entre un hombre y una mujer, será únicamente a través de la prostitución’”.
Tampoco han querido dejar pasar por alto otro tipo de agresión, en este caso verbal, a la ministra de Justicia en funciones, por parte de representantes políticos, con insultos y vejaciones de índole machista. «No todo debe estar permitido en política», indican y esperan que «la investigación de la Fiscalía aporte justicia y determine la trascendencia penal del acto», la vez que instan a los representantes políticos a qeu exijan responsabilidades y la dimisión del portavoz de Vox, Juan José Liarte, «por el riesgo que entraña que estas actuaciones queden impunes».
