La ofrenda floral que convocó el pasado viernes la Hermandad de la Virgen de las Cruces dejó una bonita estampa de ramos y centros de flores blancas alrededor del trono de la Patrona de Daimiel. Todo ello gracias a la participación de 30 daimieleñas, la mayoría llamadas María de las Cruces, que correspondieron así a la invitación de la hermandad. Previamente, se realizó una oración y una reflexión que condujo el párroco de Santa María, Valentín Sánchez Rojas.
El sábado 22 de agosto empezaba el Novenario que predicará hasta el día 30 el padre carmelita descalzo, Manuel Martín de la Sierra. Antes de cada misa, se reza el Santo Rosario desde las 20:30 horas.