Algunos vecinos del Charco del Tamujo, pedanía de Fuente El Fresno, han reabierto el acceso al camino que se dirige a la antigua estación ferroviaria del Emperador, y que discurre por la finca El Retamar de Abajo. De nuevo, han sido ellos mismos los que han cortado el candado que cortaba el paso. La acción ha sido llevada a cabo por la peña ciclista
La ruta es reconocida en la comarca debido a que es transitada regularmente por deportistas -sobre todo cicloturistas- y peregrinos en camino al Santuario del Cristo de la Veracruz en Urda. Sin embargo, en los últimos años, los propietarios han tomado medidas para controlar el acceso. Inicialmente, instalaron una cámara de seguridad y un portero automático, requiriendo a los usuarios que llamaran para entrar. Posteriormente, añadieron un candado que limitó todas las opciones de paso.
La situación se complica aún más con versiones contradictorias entre el alcalde de Los Yébenes y un concejal de Fuente El Fresno. Mientras el alcalde afirma que los candados han sido retirados legalmente, una vecina sostiene que, tras una intervención de la policía municipal de Los Yébenes hace una semana, estos fueron retirados, pero los propietarios los volvieron a colocar.
Los vecinos avisan de que «cortarán los candados que hagan falta» y que volverán a abrir el camino del Emperador «tantas veces sean necesarias, porque es un camino público que pertenece a los vecinos».
Los ciclistas de los alrededores, en pie de guerra por el Camino del Emperador
Uno de los miembros de la peña ciclista, ha expresado a Lanza su preocupación acerca de las restricciones de acceso a los caminos que cruzan la finca, y ha señalado que esta situación «lleva bastante tiempo siendo un problema». Asimismo, ha afirmado que recientemente, hace unos domingos, se encontraron con el camino cerrado y tuvieron que llamar a la Policía Local de Los Yébenes para que abrieran el acceso, «lo cual finalmente ocurrió gracias a la intervención de los guardas».
El ciclista ha compartido que, al preguntar a uno de los policías sobre la razón del cierre, recibió como respuesta que durante la semana el acceso se mantendría abierto, pero los fines de semana planeaban cerrarlo. Se justificaba esta medida afirmando que lo cerrarían «hasta que recibieran una notificación oficial que les indicara que no podían hacerlo». Los ciclistas son habituales del entorno del Charco del Tamujo y de la Finca El Retamar.
