Se trata de una primera acción para actuar sobre el soporte público del conjunto, es decir, sobre las fachadas exteriores, coincidente con la zona de soportales alrededor del espacio más abierto del conjunto, llegando hasta los edificios del borde colindantes con el pasadizo que comunica la plaza con la de Cervantes y que forman nexo de unión entre ambas.
Con esta actuación se pretenden resaltar lo que, a criterio de la Comisión Local de Patrimonio, se ha entendido como un conjunto de edificios con mayor o menor singularidad, pero que no guardan un aspecto totalmente común.
En este sentido, en la Plaza de España podrían definirse tres tipos de fachadas y como tres tipos distintos se tratará en conjunto. Su singularidad reside también en la falta de homogeneidad en el skyline, de manera que la totalidad de las fachadas presentes en este conjunto histórico tienen una altura en planta distinta.
Actuaciones en el entorno de la Plaza de España
Dentro de las actuaciones a realizar, se pueden distinguir tres grandes bloques. El primero de ellos es el tratamiento de las cornisas. Se propone dotar a la Plaza de una línea de cornisa uniforme, con un tratamiento de pintura de una línea que recorra todo el perímetro en altura de la Plaza. El color será un arenisca rojo, resaltando la línea de cornisa existente. Como contestación a dicha línea, se propone marcar una línea inferior más gruesa, que conforme un zócalo que marque la línea de las edificaciones en su encuentro con el plano horizontal de La Plaza..
El segundo será el tratamiento de balcones y carpintería. Los balcones se tratarán con una limpieza y nuevo pintado con esmalte sintético negro satinado. En lo referente a las carpinterías, de momento se propone el simple pintado con el color descubierto en el proceso de información, gris-azulado, que parece fue una constante durante mucho tiempo. También se procederá a retirar las persianas para sustituirlas por otras de madera iguales para todos los edificios. En las carpinterías de la parte baja de las edificaciones, correspondientes a la zona de soportales y usos comerciales, se propone el mismo tratamiento pero en color marrón.
Por último, un tratamiento de soportales, fachadas y petos de cubiertas. Los materiales de acabado de fachadas serán tradicionales, con revocos de color blanco, ya sean naturales o pintados, como superficie base.
Para otros elementos constructivos existentes en las fachadas, como son las falsas pilastras, elementos decorativos y recercados de huecos, se tratarán básicamente por medio de pintura de color crema y ocres. Las cubiertas, serán las existentes, con soluciones de teja árabe, y en su caso de remates de petos de cubierta, con un tratamiento de pintado de revocos con ocres y cremas, con fondo blanco.
Tal y como ha declarado el concejal de Patrimonio, José Manuel Bolaños Viso, “estamos buscando conseguir una imagen de armonía y equilibrio en la Plaza de España, que sirva para dotarla de una personalidad que la defina y sea percibida por los ciudadanos como algo propio, merecedora de su conservación y mejora en el futuro”.
Para ello, desde el Consistorio se está contactando con cada uno de los propietarios de los inmuebles y mediante la firma de un convenio con los mismos, se posibilita la actuación sobre la fachada, así como se establece la obligatoriedad de mantenimiento y conservación en los mismos términos del convenio, una Ordenanza Reguladora de Condiciones Estéticas aprobada recientemente en pleno por unanimidad y estudio de homogeneización elaborado en el seno del Consejo Local de Patrimonio Local.
“La apuesta del equipo de Gobierno, tanto económica como normativa, por el Patrimonio comenzando por el núcleo urbano más frecuentado de la localidad, es un compromiso con continuidad que tiene que terminar con la redacción y remodelación del urbanismo de este mismo espacio”, ha declarado el concejal de Patrimonio.