El primer mes de instrucción de la muerte del joven Gonzalo Buján, golpeado supuestamente por unos feriantes con los que se peleó por defender a una amiga en el Carnaval de Herencia, sigue sin esclarecer las circunstancias exactas. En los treinta días largos que han pasado desde el homicidio que conmocionó a la comarca de Alcázar de San juan y movilizó a decenas de personas la titular del juzgado de instrucción número 1 de esa localidad encargada del caso ha recogido más testimonios, varios de ellos de familiares de los dos feriantes encarcelados que cargan contra el fallecido, y de otros testigos tangenciales como el jefe de la Policía Local que llegaron cuando ya Buján estaba en el suelo.
Los testigos aportan dos versiones contradictorias, por un lado la de los dos amigos de Buján, la chica que fue increpada por orinar delante de una caravana de la feria y el otro chico que los acompañaba, y la de los propios feriantes y sus familiares.
Se iban del ferial en un coche
Los amigos de Buján, un chico atlético de 28 años, admiten que la riña verbal empezó porque sobre las diez de la noche del 10 de febrero a la salida del polideportivo en el que se celebraba la fiesta, la joven se retiró un momento a orinar y lo hizo al lado de una caravana de feriantes. Los moradores, entre ellos el padre y el hijo encarcelados, la insultaron y Buján salió en su defensa e intercambió unas palabras gruesas con ellos. Pero al parecer los tres jóvenes pensaban irse de allí y se montaron en un vehículo de tres puertas. Ya en el coche, con la ventanilla bajada, los feriantes lo golpearon como para impedir que se fueran, Buján se bajó y recibió un golpe tan rápido y contundente que el otro amigo, que se apeó al momento para intervenir no le dio tiempo a ver: Buján ya estaba incosciente en el suelo.
Buján les amenazó con disparar
El entorno de los encarcelados cuenta que fueron los jóvenes los que empezaron la pelea cuando les recriminaron su actitud incívica ante la caravana. Incluso han declarado que Buján les amenazó con darles unos tiros. Se pelean y en un determinado momento se supone que el tercer implicado, un joven rumano vecino de atracción de los acusados, interviene y le da el golpe mortal al muchacho herenciano. Esta última una versión “incoherente”, en opinión del abogado Óscar Manuel Rivas, que defiende al rumano D.C.G. de 27 años, también acusado del homicidio, aunque en libertad con la obligación de comparecer dos veces al mes ante el juzgado, hasta que se pueda probar si participó o no en la riña, algo que él niega desde el principio.
No están las pruebas de ADN
En estos casi cuarenta días no ha llegado al juzgado ni el informe definitivo de la autopsia (el preliminar dice que Buján murió de una hemorragia cerebral por un golpe) ni el resultado de las pruebas de ADN en unas pinzas de coche que podrían haber sido el arma homicida (sólo las ve el amigo de la víctima).
Mientras tanto J.F.C.F., un feriante de origen portugués afincado en Alcázar y su hijo R.C.U., siguen en prisión provisional en Herrera de La Mancha como presuntos autores del supuesto homicidio.
En este tiempo también se ha personado como acusación particular la familia del joven, colaborador de la peña El Burleta de Campo de Criptana, que le dedicó su victoria en el concurso de carrozas del Domingo de Piñata de este año en Ciudad Real. El Ayuntamiento de Herencia ejerce la acusación popular.
