Los quince ganaderos trashumantes que se quedaron bloqueados con 15.000 ovejas el Valle de Alcudia por las restricciones de la viruela ovina y caprina, ha han empezado a volver a sus destinos.
Los primeros han sido los cinco de Guadalajara, con el traslado del ganado que iniciaron a mediados de esta semana hacia diferentes localidades.
Es el caso de Juan Moreno Sánchez, quien este viernes ya había acabado de evacuar a sus 2.500 ovejas merinas a Checa, tras su transporte en tres camiones.

Es una localidad de la Sierra de Molina, perteneciente a Molina de Aragón, donde ha crecido el pasto con las lluvias primaverales y servirá de alimento para su ganado. “Aquí podremos aprovechar los pastos”, ha comentado, tras reconocer que “la cosa va mejor”, desde que en noviembre se quedaron atrapados los 15 ganaderos con 10.000 cabezas.
Él se quedó bloqueado en Mestanza, desde donde, tal y como ha recordado, realizó arduas gestiones para movilizar a sus ovejas. “Nos hemos tenido que mover mucho”, ha indicado.
Ahora está a la espera de completar los protocolos, con la cuarentena que ha de seguir el ganado durante 30 días.
La próxima semana saldrán los ocho ganaderos de Teruel, y “seguramente” el de Soria, a falta de “encontrar ubicación al de Jaén”, han comentado fuentes de la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural.
El soriano es Eduardo del Rincón, quien, junto a su mujer, Antonia Blanco, han confirmado que están con las últimas tramitaciones para volver al ganado a la localidad de Las Aldehuelas en la comarca soriana de Tierras Altas, donde comparte pastos comunales con otros ganaderos. Del mismo modo, su millar de ovejas de raza merina harán el aislamiento obligatorio en el cercado, donde tendrán un seguimiento veterinario.
Precisamente, el consejero, Francisco Martínez Arroyo, celebró este jueves en un acto que todos los ganaderos trashumantes esté en proceso de vuelta. “Ya hemos conseguido que sus comunidades autónomas de origen accedan, porque hay que cumplir una serie de normativas sanitarias muy exigentes”, dijo. “Hemos hecho los deberes”, agregó porque “nos hemos encargado desde el Gobierno de Castilla-La Mancha, de manera extraordinariamente solidaria, de garantizar el alimento” de las cerca de 10.000 ovejas de los quince ganaderos trashumantes, que han recibido pienso, paja y agua durante las últimas semanas.