Belén Rodríguez
Ciudad Real
Gustavo Romero Tercero, el criminal más peligroso enjuiciado en la Audiencia de Ciudad Real en las últimas décadas, no saldrá de prisión hasta el año 2033, según se desprende de la sentencia del 29 de septiembre de 2006 del Tribunal Supremo.
En aquella sentencia, a la que ha tenido acceso este periódico, el alto tribunal enmendó la plana a la Audiencia Provincial que sin doctrina Parot de por medio pero amparándose en una reforma del Código Penal de 1995, aplicable en varios de los delitos, por los que fue condenado, fijó cuarenta años de cumplimiento máximo de condena, que el Supremo rebajó a treinta al estimar parte de su recurso al auto de refundición de penas.
Fuentes de la Audiencia Provincial confirmaron este jueves a Lanza que no estudian poner en libertad a este persona, que lleva diez años encarcelado, ahora en una prisión de fuera de la comunidad autónoma, y que por tanto le quedarían veinte más por cumplir.
Condenado por la Sección Primera de la Audiencia en 2005 a 115 años por tres delitos de asesinato, varios de violación, robo con violencia, maltrato habitual de su mujer y amenazas, unos cometidos con el Código Penal de 1973 vigente y otros con el código de 1995; el Supremo vio en septiembre de 2006 su recurso al auto de refundición de penas de la Audiencia de Ciudad Real de 22 de septiembre de 2005 y declaró que “la limitación penológica para el cumplimiento de todas las condenas del recurrente será de treinta años de prisión, en cumplimiento sucesivo de las mismas, cada una conforme a sus correspondientes avatares jurídicos, en función del código por el que ha sido condenado”.
Así, aunque Romero, que está a punto de cumplir 42 años, redima penas por los delitos de asesinato, robo y agresión sexual en el caso de los novios Ángel Ibáñez y Sara Dotor por los que fue condenado a 64 años de prisión, inmediatamente tendría que empezar a cumplir los casi cuarenta que, sin posibilidad de redención, le quedarían por el asesinato y violación de Rosana Maroto y el maltrato habitual y amenazas a su exmujer Yolanda Sáez, cometidos en los años 1998 y 2003, respectivamente.