Toledo, 6 abr (EFE)
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) aprecia un riesgo elevado de que Castilla-La Mancha incumpla el objetivo de estabilidad presupuestaria fijado en el 0,3 por ciento para 2016.
En su informe sobre los presupuestos iniciales de las administraciones públicas dado a conocer hoy, la AIReF argumenta que «el empeoramiento derivado del cierre de 2015 incide negativamente» en las posibilidades de cumplimiento tanto del objetivo de estabilidad como de la regla de gasto en 2016.
A su juicio, «las peores» evoluciones de los ingresos y gastos manifestadas al cierre de 2015 han llevado a elevar de moderado a elevado el riesgo de incumplimiento respecto a noviembre del pasado ejercicio.
La autoridad fiscal considera que en 2016 los gastos estarán por encima de los previstos en el proyecto de ley de presupuestos de la Junta, aún en tramitación en las Cortes regionales, dada la evolución de los gastos en 2015, «una vez descontadas operaciones no recurrentes del 0,2 por ciento del PIB».
Añade que los resultados de 2015 plantean «incertidumbres» respecto a la realización de determinados ingresos.
Además, la AIReF mantiene respecto a noviembre de 2015 que la deuda de Castilla-la Mancha «no presenta una dinámica de crecimiento significativo a corto plazo», aunque añade que «no está exenta de riesgos a medio y largo plazo».
Sostiene que hay riesgos para la sostenibilidad financiera por el elevado nivel de deuda de partida, por perturbaciones fiscales negativas que «generarían trayectorias insostenibles» y por necesidades de liquidez «relativamente contenidas si se mantuvieran los mecanismos extraordinarios de financiación».
En este sentido, apunta que en el medio plazo podría «haber tensiones por los fuertes vencimientos que debían ser atendidos».
La AIReF también hace referencia a que hay «indicadores de estrés de corto plazo en línea o ligeramente por encima de la media de comunidades autónomas» y a que la calificación crediticia está «entre las más desfavorables del subsector».
«Lo que podría implicar costes adicionales en ausencia de los mecanismos de financiaciones del Estado y tener que recurrir al mercado», añade.
A nivel nacional, la autoridad fiscal ha calculado que el déficit del 2016 cerrará en el 4 % del PIB frente al 2,8 % previsto y ha alertado de que España «sigue adoleciendo de un déficit de credibilidad de las finanzas públicas».
