El Gobierno de Castilla-La Mancha está fomentando iniciativas, junto con los operadores de telecomunicaciones, que permitan a los habitantes de zonas desfavorecidas asomarse al escaparate digital, tal y como ha señalado el director general de Telecomunicaciones y Nuevas Tecnologías, Alipio García.
En este sentido, el esfuerzo inversor que realiza la administración regional en la provincia va dirigido en esta ocasión a la instalación de varias antenas de telefonía móvil para dar cobertura 4G en los municipios de Anchuras y El Robledo.
En la visita a ambas localidades también asistió el director provincial de Fomento, Casto Sánchez, quien manifestó que el objetivo es reducir la brecha digital para eliminar las desigualdades entre territorios y favorecer la implantación global de la Sociedad de la Información y el Conocimiento.
Sánchez destacó que en menos de una década la banda ancha se ha convertido en un “servicio básico y, sin embargo, en algunas zonas todavía no está disponible, siendo las zonas rurales o despobladas las mayores perjudicadas al no haber suficiente inversión privada en infraestructuras de redes por parte de los operadores”.
En concreto estas instalaciones se implantarán en las pedanías que actualmente no cuentan con ella o que presentan una calidad muy deficiente, como son Navalrincón y Las Tablillas, pertenecientes a El Robledo, y Gamonoso y Las Huertas del Sauceral, en el término municipal de Anchuras, unas actuaciones agradecidas por ambos ediles, Elena Tamurejo y Santiago Martín.
Ocio y entretenimiento
El director provincial de Fomento explicó que a partir de ahora estos vecinos “podrán acceder a una variedad más extensa de servicios de ocio y entretenimiento, además de permitirte trabajar desde cualquier lugar”, además de recordar que la banda ancha posibilita la implantación de nuevos servicios interactivos y multimedia, como la telemedicina, la videoconferencia, los juegos en red, la teleformación y un largo etcétera.
La banda ancha también abre un amplio abanico de posibilidades de comunicación del ciudadano con la Administración facilitando la tramitación electrónica; en el ámbito rural, además de mejorar las posibilidades de negocio de las empresas ya instaladas, favorece la generación de nuevas iniciativas empresariales a bajo coste y ofrece a los jóvenes nuevas oportunidades laborales, favoreciendo así el asentamiento de la población.
En definitiva, Casto Sánchez puso de relieve que este despliegue “acercará la universalización de los beneficios de la Administración electrónica a los ciudadanos de estas pedanías situadas en zonas rurales poco pobladas y de difícil acceso y evita la generación de desigualdades y situaciones de brecha digital”.
