La consejera de Educación de Castilla-La Mancha Rosa Ana Rodríguez se ha comprometido con la escuela rural en el colegio agrupado Valle del Bullaque de El Robledo, en la apertura del curso escolar 2022-2023, “en el que la educación gana protagonismo”, ha dicho.
La elección de centro no es casual, en un curso en el que la provincia de Ciudad Real pierde unos 2.400 escolares de las primeras etapas educativas por la baja natalidad y la despoblación, Rodríguez ha insistido en que la Consejería Educación mantendrá colegios abiertos aunque haya menos de once alumnos.”Las escuelas rurales son los epicentros culturales de los pueblos, para nosotros un pilar imprescindible en una región sumamente rural. Nuestros pueblos tienen en muchos casos menos de cinco mil habitantes y tenemos que dar respuesta a ese modelo de escuela que tenemos”, ha remarcado.
Por esa baja natalidad la escolarización vuelve a caer en Castilla-La Mancha, sobre todo en las atapas más tempranas. En la región se han cerrado dos secciones de dos centros, en una porque solo quedaba una niña y en otra porque las familias han decidido trasladar a los pocos alumnos a otra localidad, ninguno de eso colegios en la provincia. “Compensamos los centros que abrimos por los que cerramos, pero el equilibrio es en estos momentos positivo”, ha respondido la consejera.
Planes de lectura que incluirán a las familias
Con la educación en el centro del trabajo académico, lastrado en los últimos dos cursos por la pandemia de coronavirus, la consejera ha explicado que como novedad este curso todos los centros tendrán un plan de lectura que conlleva generar hábitos y potenciarlos en todas las edades, además de para desarrollar competencias en todas las lenguas. La importancia de estos planes redise “en que se harán harán teniendo en cuenta a toda la comunidad educativa, incluidas las familias que quieran y las bibliotecas municipales que colaborarán en esos planes de lectura”.
En este centro agrupado cursan 89 niños, trece de ellos en la sección de Pueblo Nuevo del Bullaque (pedanía de Retuerta y centro administrativo del parque nacional de Cabañeros). Curiosamente este año el centro ha recibido una atípica incorporación de 11 niños de 3 años en infantil.
“Máxima normalidad” y Lomloe
El curso de la “máxima normalidad”, en palabras de Rodríguez, afronta el reto de convivir con la implementación de la nueva ley de educación Lomloe, “que se trabajará en los cursos impares”, y la Lomce. “Vamos acompañar con todo nuestro potencial formativo a todos los equipos directivos y docentes para poder en marcha esta nueva ley”.
Niños de 2 años, empezando el proceso
En cuanto a la posibilidad de que Castilla-La Mancha incorpore a la enseñanza obligatoria a los niños de 2 años, la consejera ha respondido que “estamos empezando con ese proceso”.
Ilusión por recobrar la normalidad
El curso académico de la normalidad tras la covid, 2022-2023, ha empezado este jueves en la provincia sin mascarillas ni distancias y con 93.500 alumnos, cifras inferiores en unos 2.400 alumnos, según han confirmado desde la Delegación Provincial de Educación.
La Consejería de Educación destaca el incremento de ciclos formativos de Formación Profesional, la apuesta por la digitalización y el aumento de los servicios y ayudas a disposición de las familias.
El nuevo curso en cifras
Los 85.400 alumnos de educación infantil, primaria, ESO, bachillerato, FP y educación especial se desglosan de la siguiente forma: algo más de quince mil en infantil (2.700 menores de tres años y 13.200 de segundo ciclo). En primaria son 28.000 alumnos, 21.000 de educación secundaria obligatoria, 7.000 de bachillerato, 360 de educación especial, y 10.200 personas matriculadas en Formación Profesional, de ellas 1.200 en ciclos de grado básico, 4.400 de grado medio y 4.600 en ciclos formativos de grado superior. A estos 85.400 alumnos hay que añadir otros ocho mil de las enseñanzas de régimen especial (artes plásticas y diseño, idiomas, música, danza, etc) y de educación de adultos, hasta alcanzar los 95.500. Hay más de 7.800 docentes en la provincia de Ciudad Real.
30 millones en obras en los centros
El Gobierno de Castilla-La Mancha ha contado que desde el año pasado pasado se están invirtiendo en la provincia en los colegios e institutos 30 millones de euros para entre otras obras construir y renovar decenas de instalaciones deportivas, reformar espacios interiores y renovar las luminarias e instalar placas solares en el tejado de todos los institutos.
Esta inversión afecta también a la creación de nuevos servicios con más comedores y aulas matinales. De hecho el curso comienza con doce nuevas aulas matinales en la región de las que siete se abren en la provincia de Ciudad Real.
8 comedores escolares nuevos
Son ocho los nuevos comedores en la provincia de Ciudad Real de los diecisiete en la región, en concreto en el colegio Miguel de Cervantes de Tomelloso; Virgen de Criptana, de Campo de Criptana; Menéndez Pelayo, de Puertollano; Virgen de la Sierra, de Villarrubia de los Ojos; Hijos de Obreros, de Almadén; Javier Paulino y El Santo, de La Solana, y Agustín Sanz de Moral de Calatrava.
