N. V.
Manzanares
La Cooperativa Jesús del Perdón de Manzanares abrirá la semana que viene la vendimia con algunos varietales específicos, aunque habrá que esperar a finales del mes de agosto o principios de septiembre para la normalización de la campaña. El presidente de la cooperativa, Félix Cano, señaló ayer que “la vendimia viene con diez o doce días de retraso con respecto al año pasado”, ya que las muestras tomadas de forma periódica las últimas semanas reflejan que el grado todavía es muy bajo. La uva chardonnay será la primera en llegar a los descargaderos, seguida de otras varietales como el sauvignon blanc a finales de agosto, y habrá que esperar hasta el 17 o 20 de septiembre para recoger la airén y cencibel.
La sequía en principio no afectará al nivel de producción de la cooperativa por el aumento de los campos dedicados al cultivo de la vid. Félix Cano expresó que “esperamos coger entre un 5 y un 10 por ciento más que el año pasado”, según explicó, “no por un aumento de la producción de los viñedos que ya existían, sino por las nuevas parras”. El viñedo de secano frente al regadío será el más afectado por la falta de precipitaciones.
Con la mirada puesta en el cielo, el presidente de la cooperativa también admitió el nerviosismo de los agricultores por las posibles tormentas de granizo, así que prefirió “que nos quedemos como estamos” sin precipitaciones, antes de que la ‘piedra’ pueda dar al traste con los cultivos. Félix Cano achacó también a la climatología el retraso de la vendimia, tras “un invierno muy duro y seco, y un verano de mucho calor, que no ha permitido que la vid tuviera la suficiente humedad para su pronta maduración”.
Asimismo, el presidente de la cooperativa indicó que Bodegas Yuntero ha invertido más de 5 millones de euros a lo largo del año en la mejora de sus instalaciones, con la ampliación de la depuradora, la mejora del colector, el aumento en 10 millones de litros de los depósitos y la creación de oficinas para el laboratorio y los servicios técnicos.