J. C. C.
Ciudad Real
Los entrega de cheques el pasado jueves y viernes a centenares de afectados por la quiebra de la Cooperativa Tierra de Calatrava de Miguelturra simboliza el fin de un concurso de acreedores que comenzó hace cinco años y cinco meses. Ahora, el Consejo Rector, en colaboración con el Banco Santander, trabajan en el pago al resto de afectados y en garantizar la viabilidad de la cooperativa.
Las casi quinientas personas que vieron devuelta gran parte de su dinero la semana pasada formaban parte de las dos agrupaciones de afectados, una independiente y otra bajo el aval del Ayuntamiento miguelturreño, que vendieron al Banco Santander 13 millones de pasivo por un importe de 10 millones, tras reducirse la quita correspondiente, que osciló entre el 0 y el 30 por ciento, según la cuantía adeudada.
Ahora la labor del Banco Santander continúa con la adquisición de la mayor parte de la deuda de los más de 1.100 acreedores restantes en un concurso cuyo pasivo total ascendía a casi 36 millones de euros.
A estos acreedores que no estaban suscritos a ninguna de las dos plataformas de afectados se les ha presentado dos alternativas para sumarse al convenio que el Consejo Rector de la cooperativa y la entidad financiera registraron en el Juzgado de lo Mercantil nº 4. La fecha límite para ellos es el próximo 26 de julio.
La primera alternativa es que los afectados conviertan el dinero que se les adeuda en un préstamo participativo a la cooperativa, de modo que, además de un interés fijo, recibirían parte de los beneficios de la cooperativa durante diez años. En esta opción no habría ninguna quita y cobrarían el 11% en el primer trimestre tras la aprobación definitiva del convenio.
La segunda opción sería el cobro de la deuda con una quita del 33 por ciento en un periodo de cuatro años, adelantándose un 1 por ciento tras el primer trimestre de vigencia del convenio y un 5 por ciento a los dos años.
En esta segunda opción quedarán incluidos aquellos afectados que no se decanten por ninguna de las alternativas propuestas, aquellos que se pronuncien sobre ninguna de ellas y aquellos que pese a haber elegido la primera no puedan acogerse a ella al excederse la cantidad destinada a ésta, unos veinte millones de euros.
En este concurso, el Ayuntamiento de Miguelturra, que se vio afectado por el concurso, decidió en septiembre permutar su crédito de 1.673.000 euros por uno de similares características con garantía hipotecaria. Igualmente el viernes aprobó el Pleno, en sesión extraordinaria, sumarse a la primera opción y convertir otra deuda de 285.642 euros (en concepto de licencias de obra a la cooperativa) en un préstamo a diez años.
Con esta última acción municipal para el alcalde miguelturreño, Román Rivero, “culmina todo un proceso que ha habido de defensa de los intereses de los afectados de la cooperativa”.
Viabilidad
Como explica el presidente del Consejo Rector de Tierra de Calatrava, Bernardo Cortés, ahora el reto es garantizar la viabilidad de la cooperativa. En este sentido alabó el trabajo de todos los miembros del consejo para, primero, que los afectados recuperen su dinero, y ahora que la cooperativa tenga futuro.
Por esta razón pide a los socios y a aquellos agricultores que no lo sean que confíen y apoyen a la cooperativa para que pueda funcionar con normalidad y que, de este modo, perviva un importante recurso económico de Miguelturra.
Cortés detalló que en el momento en el que finalice el proceso del convenio, el Consejo Rector volverá a tomar el mando de la cooperativa. Junto a ellos habrá un representante del Banco Santander y otro de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, que velarán por el correcto funcionamiento de la organización cooperativista.
En ese momento Cortés indicó que se convocaría una asamblea general para explicar la situación de la cooperativa a los socios y, si la asamblea quiere, cambiar la junta directiva. o
