El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha ensalzado esta tarde en Almagro la diversidad gastronómica regional y sus potencialidades turísticas para el desarrollo de oportunidades económicas.
«El turismo no tiene tope», ha dicho en la inauguración del Centro de Tecnificación Gastronómica (CTG), un proyecto impulsado por la Diputación de Ciudad Real en el Palacio de Valdeparaíso, con el apoyo y asesoría de la prestigiosa y pionera fundación Basque Culinary Center -BCC- (www.bculinary.com).
El objetivo del nuevo centro es empujar a la gastronomía manchega hacia la excelencia, a través de la formación de los profesionales del sector, además de promocionar la cocina castellano-manchega y ciudarrealeña.

Ante la presencia del director del Basque Culinary Center, Joxe Mari Aizega, y el cocinero Paco Roncero, que ha patrocinado el acto, García Page ha subrayado el papel de los profesionales de la restauración en Castilla-La Mancha, representados por las asociaciones regional y autonómica del colectivo, y ha agradecido la apertura de este centro dedicado a la formación, innovación, e investigación.
El jefe del Ejecutivo regional ha alabado la cocina vasca y su reconocimiento mundial “por su excelencia”, ejemplo del buen hacer restaurador de toda España, por lo que “romper barreras invisibles de determinados clichés no plantea ninguna controversia”. “Se puede tener mucha cantidad y mucha calidad”, ha agregado, para sostener a renglón seguido que “es bueno para la cultura económica y social de un país copiar lo que se hace fuera y también lo que se hace dentro”.
Lo que ha llamado “el hecho gastronómico” es, en su opinión, un potencial para cualquier territorio y desde Castilla-La Mancha “vamos a sacarle provecho”.
Así, ha valorado el potencial turístico a nivel global, con una proyección de 2.000 millones de viajeros en el mundo y de 120 millones en España, que «está en condiciones de seguir batiendo récords». Por ello, ha aplaudido la “realidad” de la gastronomía en la tradición culinaria nacional, que es “ filosofía y arte”, desarrollada por profesionales «capacitados» en un oficio “enormemente sacrificado”.
Ser los mejores
Por su parte, el presidente de la Diputación, Jose Manuel Caballero, ha subrayado la oportunidad que supone el CTG para los jóvenes “talentos” que culminen sus grados de Formación Profesional y Formación Ocupacional, y ha presumido de haber atraído a los mejores profesionales para poner en marcha la escuela.
De hecho, la institución ha realizado una inversión de casi 800.000 euros, una financiación que permitirá al histórico inmueble, en pleno de centro de Almagro, acoger unas modernas instalaciones para cocinar, con el montaje de hasta 16 cocinas al servicio de la gastronomía y la alimentación.
Caballero ha reiterado la necesidad de mantener y retener a los profesionales del futuro de la provincia y la región, en este caso del mundo gastronómico, así como ha destacado las cualidades de la tradición culinaria de Castilla la Mancha, que ya en el Quijote se reflejó con hasta 150 platos.
“Hoy se materializa este Centro de Tecnificación Gastronómica”, ha dicho el jefe de la Corporación provincial, visiblemente “contento y emocionado”, un compromiso de su legislatura cumplido, que se inició en 2018, cuando, según ha evocado, visitó la prestigiosa fundación vasca, “de la que me enamoré”, y le hizo plantearse “no ser el Basque Culinary Center, pero sí hacer algo en Ciudad Real con el Basque Culinary Center”. “De ahí viene toda esta locura”.

El objetivo de proyecto es “ser los mejores en el manejo de las producciones agroalimentarias y de las tradiciones culinarias, como despensa de Europa que somos, para poder ofrecerlo a los paladares más exigentes”.
Por eso, se ha marcado como reto ser un centro de excelencia, que alcance cotas de profesionalidad similares a los índices de éxito de la Feria Nacional del Vino (Fenavin), que es la “mejor y única” en el mundo en su categoría. El planteamiento es “ser capaces de innovar, experimentar e impulsar la gastronomía de nuestra tierra para que sirva al desarrollo económico” porque cada vez “hay más demanda y “cuando viajamos nos acordamos de lo que comemos y bebemos».
Y por eso “nos hemos rodeado de los mejores, ha insistido Caballero, como es nuestra Asociación provincial de Hostelería, este centro es para ellos”, además de haber puesto las bases para que las plantillas “puedan vivir de su trabajo, con derechos reconocidos y buenos salarios”. “Queremos hacer con la gastronomía, con la hostelería, con la restauración, con la enología y con el enoturismo lo que hemos hecho con Fenavin, ser los primeros”, ha remachado, un objetivo que “conseguiremos en la próxima década”.
Cadena de valor
En la misma línea, el director general BCC, Joxe Mari Aizega, ha hablado del Centro de Tecnificación Gastronómica (CTG) no sólo como obrador de la alta cocina, sino como un punto de unión de “un sector muy amplio, una cadena de valor, que integra desde el producto y su transformación, al mundo del vino, la restauración, el turismo y el consumo”.
Es un ámbito, ha agregado, que «tiene muchas profesiones y muchos sectores, y creo que todo ese gran ecosistema está basado en la calidad, autenticidad y valor añadido”. Es la filosofía del BBC y centrará su colaboración con el centro almagreño.
Precisamente, como asesor del CTG, Aizaga ha encabezado «el asesoramiento de las instalaciones y sobre los espacios y programas de formación”, por lo que el reto es “seguir aportando” para cualificar a las futuras generaciones de chefs y hosteleros manchegos.
Precisamente, la entidad que dirige, ha comentado, nació con los desafíos de vincular la gastronomía al mundo universitario y para “colocar a la cocina española en un primer nivel mundial, en términos de creatividad, innovación y vanguardia”.

Apoyo
El vicepresidente de la Asociación de Hostelería de Ciudad Real, José Ángel Sánchez, por su parte, ha agradecido en nombre del sector “este tipo de iniciativas”, así como ha mostrado la disposición del colectivo “a apoyar» a la escuela. “Seremos partícipes en la formación desde este centro y entre todos tenemos que sacarlo y hacerlo grande, para hacer grande la provincia”.

La puesta de largo del CTG ha atraído a muchas personalidades del mundo de la restauración y la hostelería, con rutilantes nombres como el de la repostera Rocío Arroyo, que también ha intervenido. Arroyo ha destacado el punto “que nos une”, centrado en «la formación a los futuros profesionales”, sumado al aprovechamiento de las materias primas de la zona, que ella misma promociona desde Raíz Culinaria.

También ha asistido el expresidente Castilla la Mancha José María Barreda y su mujer y exparlamentarias socialista Clementina Díez de Baldeón, además de otras autoridades provinciales y locales como el alcalde de Almagro, Daniel Reina. El regidor ha recibido emocionado las nuevas instalaciones y ha deseado que supongan una fuente de oportunidades y recursos económicos para la ciudad, que «es la puerta de entrada de la provincia».