La Fiscalía Provincial de Ciudad Real estudia presentar recurso a la sentencia absolutoria de la Audiencia Provincial de un joven de Porzuna, V.G.R., por la presunta violación de una amiga el año pasado en esa localidad.
“La sentencia no recoge nuestra petición y contiene algunas cuestiones que podrían discutirse en el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha”, señala el fiscal jefe Luis Huete. Sin embargo la decisión no está tomada, se adoptará o no a lo largo de esta próxima semana.
El acusado ha estado año y medio en la cárcel
El acusado, que el mes que viene cumplirá los 21 años, ha pasado un año y medio en prisión provisional por esto (desde el 17 de abril de 2018 hasta el 15 de noviembre de este año). Ingresó dos días después de que la perjudicada, una chica de 19 años, lo denunciara por violación y amenazas, en una relación sexual que él dijo que fue consentida.
Las “serias dudas” del tribunal
La sección segunda de la Audiencia Provincial, que juzgó el caso a primeros de mes, argumenta en el fallo “que no se ha podido dar como probado, por existir serias dudas, que el acusado empleara la fuerza o violencia que describe la propia víctima para vencer su voluntad y mantener por ello las relaciones sexuales completas”.
No se pronuncia sobre pruebas contundentes
Sin embargo Ángel Rico, el abogado de la acusación particular, que sí ha anunciado formalmente que presentará recurso, considera que el fallo “omite cualquier pronunciamiento sobre pruebas de cargo determinantes que se practicaron en el juicio, como el informe del equipo psicosocial que fue absolutamente contundente respecto a la credibilidad de la víctima”.
La chica no tenía motivos para denunciar
La sentencia tampoco entra a valorar “la falta de motivos para denunciar algo que no hubiera ocurrido realmente, y obvia la jurisprudencia del Tribunal Supremo, invocada por esta acusación respecto a la trascendencia que tiene la amenaza con la divulgación de videos de contenido sexual para quebrar la libre voluntad de la víctima”, explica el letrado.
La fiscalía pidió 11 años y medio de prisión
La fiscalía pidió por este caso 11 años y medio de cárcel, por delitos de agresión sexual y amenazas. La acusación particular elevó a 15 años la petición de la condena por los mismos delitos.
La familia de la víctima está indignada con esta absolución, que ha agravado la situación psicológica de la perjudicada, que está asustada por la puesta en libertad del acusado, sin orden de alejamiento respecto a ella, cuando ambos viven en Porzuna.