La iglesia de la Asunción ya ha comenzado sus labores en materia de seguridad, tras el requerimiento realizado por el propio ayuntamiento, y ante el peligro que conlleva el hecho de que algunos cascotes caigan de la torre de este monumento histórico de la ciudad. Así, esta mañana llegaba hasta la Plaza de la Asunción una grúa de grandes dimensiones para poder llegar hasta la zona más alta de la iglesia y proceder a la instalación de una malla protectora que evite la caída de estas piedras y pizarras al suelo, con el consiguiente peligro que esto puede provocar dado que se encuentra en una zona de paso de un colegio de la ciudad.
El párroco de la iglesia de la Asunción, Juan Carlos Gómez, explicaba que la media naranja sobre la que se posa el Sagrado Corazón de Jesús tienen láminas de pizarra y su mal estado unido a los hielos de estos últimos días le hace ser más vulnerable a estos desprendimientos, por este motivo van a tomar estas medidas de protección que supondrán a la iglesia una cuantía de 1.200 euros, cantidad que el propio párroco ya daba buena cuenta a sus feligreses.
Estos trabajos son solo el preámbulo para poder esperar a la primavera, fecha en la que estará finalizado el proyecto de restauración de esta parte de la Asunción que en estos momentos está finalizando el arquitecto José Carlos Menasalvas, que ya fue el encargado hace veinte años de una restauración integral de esta parroquia, a excepción de la torre de la misma, que es la que presenta en estos momentos estos defectos.
Así, Gómez concretó que solicitarán a las administraciones subvenciones para su reparación al tratarse de un monumento declarado como Bien de Interés Cultural por la JCCM que ayude a sufragar los gastos que se originen de estas reparaciones.