Cooperativas Agroalimentarias Castilla-La Mancha y Asaja regional han respaldado la petición de una destilación de crisis, solicitada hace casi un mes por la Asociación de Empresarios de Industrias Vitivinícolas de Ciudad Real (Apeiv), que, según su presidente, Lorenzo Delgado, ha sido autorizada esta misma semana por la Consejería de Agricultura.
El sector del vino pretende así paliar la situación que atraviesa a consecuencia del parón en las operaciones comerciales de cooperativas y bodegas por el Covid-19, para dejar espacio en sus instalaciones ante la próxima cosecha y para luchar contra los bajos precios de las ventas, que han pasado de los 0,76 euros el litro a los 0,50 actuales.
El objetivo sería, según Delgado, utilizar parte de las existencias de vino para elaborar alcohol de uso de boca a precio de mercado y destinarlo a la desinfección y esterilización de recursos sociosanitarios, incluso del material protector de los profesionales que luchan contra la pandemia.
Los empresarios vinícolas están a la espera de que las industrias alcoholeras -hay autorizadas 16 en toda España y 8 en la región- puedan dedicar sus instalaciones a esta “urgente” transformación del vino. “La pelota está en su tejado”, ha sostenido Delgado, quien ha recordado que “los operadores autorizados pueden acogerse a las primas correspondientes a la destilación de subproductos y así reducir sus costos”.
Ha valorado el respaldo de las organizaciones agrarias, aunque “tenía que haber sido antes” y ha insistido en “altas necesidades” de demanda de hidroalcoholes, en este caso un producto “bueno y de calidad”, al ser de origen vegetal.
“Castilla-La Mancha produce mucha uva, ha argumentado, y tenemos que adaptarnos a las necesidades del mercado”, desde el vino embotellado, al mosto de uva, los vinagres o el alcohol para beber y para usos cosméticos o sanitarios. “Ahora tenemos una urgencia, con muertes e infecciones, que no se había producido en 100 años”, ha reflexionado.
A su juicio, las existencias de la región «son más que suficientes para obtener un alcohol de alta calidad y en cantidad suficiente para abastecer la demanda de mercado a nivel nacional e internacional”, ha recordado el mismo portavoz .
En concreto, el volumen de caldos que guardan bodegas y cooperativas “es alto”, con 18,23 millones de hectolitros de vino y 3,73 millones de hl de mosto -50,06 millones hl de vino y 4,2 mhl de mosto en España- el pasado noviembre, según los últimos datos del Infovi publicados en enero, aunque sea menor a los 22,24 millones de hectolitros y 4,16 de mosto del mismo periodo del año anterior.
Según el cálculo de los bodegueros ciudarrealeños, harían falta 4,7 millones de litros de alcohol, a tenor de sus cálculos. «Si cada habitante consume un envase de 100 ml a la semana, en España serán necesarios 47 millones de envases semanales, cantidad a la que hay que añadir al menos un 30% más para cubrir los sectores esenciales y que necesitan un mayor y continuado uso, como sanitarios, residencias, alimentación, farmacias, transportistas, servicio basuras, o servicios funerarios
De estos resultados «se extrae la urgente necesidad de alcohol destilado» para la esterilización y así prevenir los contagios.
Delgado ha recordado que la solicitud fue realizada al Ministerio de Sanidad y a la Consejería de Agricultura, administraciones que tras varias semanas de cartas y recordatorios, ya hablan de la posibilidad de destilar alcohol para uso sanitario.