La climatología sí permitió la salida de la última de las procesiones de la Semana Santa solanera y, minutos después de la una del mediodía, se celebró en la Plaza Mayor el encuentro de Jesús Resucitado y la Virgen de los Campanillos, que habían salido de la parroquia de Santa Catalina y se habían colocado cada uno en un extremo de la Plaza, sustituyendo la lluvia de caramelos a la de agua en la última procesión de la Semana Santa.
En el momento del Encuentro sonó el Himno Nacional, interpretado por la Banda Municipal de Música de La Solana mezclándose con el aplauso de los asistentes y, al mismo tiempo, se iniciaba la lluvia de caramelos que lanzaban los directivos de las diferentes cofradías y hermandades y que no cesó a lo largo de todo el recorrido procesional.
Pasodobles
Tras la cruz alzada marchaba la carroza con el Resucitado, seguido de la Banda Municipal que, para esta ocasión, deja las marchas típicas procesionales que son sustituidas por pasodobles, como es tradicional desde tiempo inmemorial en esta procesión-
La lluvia de caramelos y otros dulces, que lanzaban al aire los directivos de las cofradías, congregó a numerosas personas en todo el itinerario, así como en la Plaza Mayor en el momento de entrar las imágenes en el templo parroquial.
El párroco de Santa Catalina, Benjamín Rey, estuvo acompañado en el desfile procesional por los presidentes y presidentas de las cofradías, así como por el alcalde Luis Díaz Cacho y concejales del equipo de gobierno municipal.