J. Y. / Ciudad Real
Fue también un 27 de marzo cuando la Hermandad de Nazarenos de la Flagelación de Nuestro Padre Jesús de la Bondad y María Santísima del Consuelo procesionó por primera vez en la Semana Santa ciudarrealeña. Y ha sido un 27 de marzo, veintidós años después, cuando decenas de hermanos lamentaban al filo de las 20 horas (empezaba a las 19) la suspensión de su salida en el Miércoles Santo.
Algunos de los numerorísimos niños que participan en el cortejo no pudieron evitar las lágrimas de tristeza, al igual que el hermano mayor, Emilio Martín, que confirmaba que era la primera vez desde 1991 que el paso de misterio y el de la imagen mariana no desfilaban por las calles de Ciudad Real.
Desde los miembros de la junta de gobierno de la cofradía, pasando por los penitentes, los lanceros de caballería de “Virgen del Prado”, los músicos y otros fieles, mantuvieron la esperanza hasta el final ya que, según les habían comunicado los expertos, la negra nube que cubría el cielo de la capital “podría moverse hacia otro sitio”. Pero tras descargar un intenso volumen de agua, fuentes de la AEMET, de mirandoalcielo.com y de la Base de Almagro confirmaron lo peor: se estaban posicionando otras nubes, con altas probabilidades de lluvia que caería en algún momento de las seis horas del recorrido.
De esta manera, el paso del misterio, que representa el castigo que le infligieron a Jesús ante del suplicio de la Cruz, y el de la Virgen del Consuelo se quedaron preparados. Fue delante de ambos iconos donde Martín y el consiliario Antonio Ruiz, párroco de Santo Tomás de Villanueva, anunciaron la suspensión por la adversa climatología.
Ruiz invitó a “vivir internamente” este momento de la Semana Santa y dio un abrazo extensivo a los cientos de hermanos de la cofradía. Antes de rezar un responso y bendecir a los presentes, animó a los hermanos porque “estáis en un lugar de preferencia para Jesús”.