La lluvia no impedía finalmente la celebración de la procesión de San Sebastián por las calles de su barrio, aunque nada más finalizar la misma comenzó de nuevo a llover.
Los actos del día principal de las fiestas comenzaron con una comida solidaria, para continuar por la noche con la celebración de la misa en su ermita, oficiada por el párroco de Santa Catalina.
En la homilía Benjamín Rey se refería al testimonio que de la fe cristiana había sido referente San Sebastián, que dejó clara incluso con el martirio para dejar claro su compromiso creyente.
Asimismo recordó al presidente de la Hermandad Manuel Delgado ausente por la hospitalización de su madre.
En el momento del ofertorio eran presentados al celebrante diversos objetos relacionados con el barrio, no faltando el tradicional esparto con el que los habitantes del mismo han trabajado durante tantos años, así como una maleta que utilizarán en el teatro que el grupo de la Hermandad representará para allegar fondos para el arreglo del tejado.
Coro de la Iglesia de Santa María
El coro de la Iglesia de Santa María participó con sus cánticos en diferentes partes de la misa, concluyendo con la interpretación del Himno a San Sebastián.
Seguidamente comenzó el desfile procesional por las calles del barrio, que abría el estandarte de la Hermandad, continuando la Agrupación Musical de San Sebastián con su uniforme de gala, así como representación de las diferentes cofradías y hermandades solaneras.
La imagen de San Sebastián realizó el recorrido en su carroza, engalanada con numerosas flores, marchando detrás del mismo el párroco de Santa Catalina, directivos de la Hermandad y concejales del grupo socialista del Ayuntamiento, cerrando la banda de cornetas y tambores del Santo Sepulcro y Virgen de la Soledad de Villanueva de los Infantes.
Una vez que la imagen llegó a la ermita se ofrecía una numerosa colección de fuegos artificiales en honor al santo, que entró en su templo a los acordes del himno que interpretó su Agrupación Musical.