El proyecto de abrir una mina de wolframio en Abenójar, que promueve la empresa Mining Hill’s con socios de la provincia vinculados a la ingeniería minera, se ha topado en los trámites finales con los propietarios de una de las fincas con terrenos a expropiar, el Arroyo de la Virgen.
Los dueños de esta hacienda, de más de 3.400 hectáreas de caza y recreo, consideran lesivo para sus intereses una mina de la envergadura de la que se está proyectando en sus tierras, y este miércoles, cuando se ha firmado el acta previa de ocupación en el Ayuntamiento de Abenójar, han planteado un recurso que retrasará la ocupación efectiva del terreno, pero no la impedirá, según han confirmado los promotores a Lanzadigital.com.
Todos los requisitos medioambientales
Agustín Espinosa, director provincial de Economía, Empresas y Empleo asegura que el proyecto, que arrancó hace diez años, cuenta con todos los requisitos medioambientales y no genera rechazo social. “Los trámites actuales son los que establece la norma”, ha aclarado.
La mina para extraer wolframio afecta a unas 49 hectáreas de la finca que se opone a la expropiación, “es una parte minúscula en comparación con el terreno colindante”, explican los promotores, que respetan que cada uno vele por sus intereses, pero seguirán defendiendo los suyos.
No hay fecha para el inicio del trabajo previo
¿Cuándo empezarán las labores de preparación de la mina?, no se sabe con exactitud pero se supone que estamos asistiendo a los últimos trámites de los largos y complejos proyectos mineros.
Esta mina de wolframio de Abenójar ha superado ya dos momentos decisivos, “y con dos gobiernos de distinto color político”, remarcan desde Minning Hill’s: el 19 de diciembre del año 2014 (en Castilla-La Mancha gobernaba el PP), cuando se aprobó la declaración de impacto ambiental y el 3 de agosto de 2015 (gobernaba el PSOE en la región), cuando obtuvieron la concesión de explotación.
Hace unos meses, en junio, el proyecto consiguió la declaración de urgente ocupación de bienes y derechos para el desarrollo de los trabajos, instalaciones y servicios.
El wolframio es un mineral estratégico de especial interés porque escasea en el mundo y hay mucha demanda en todos los sectores en especial los relacionados con las nuevas tecnologías y la industria de automoción.
La mina de Abenójar es subterránea, el mineral se extraerá del subsuelo, y sólo en los trabajos preparatorios, de un año y medio, se necesitará mano de obra de más de trescientas personas –calculando por lo bajo-, unos 175 empleos cuando la mina entre en producción.
Simpatía social en una zona de pasado minero
Además de contar con el apoyo expreso del Ayuntamiento de Abenójar y los vecinos de esta localidad, el proyecto ha ido sumando en estos largos años de preparación toda una corriente de apoyo de otros consistorios de la zona como Almadén, Almodóvar del Campo, Cabezarados, Chillón, Corral de Calatrava o Saceruela.
También agentes sociales como Fundescop Puertollano, FICA-UGT de Ciudad Real y Castilla-La Mancha, la Federación de Empresarios de la provincia de Ciudad Real (Fecir) y de la Asociación para el Desarrollo Sostenible Valle de Alcudia se han mostrado favorables a esta mina.
Localizada en el paraje El Moto, en la zona del cerro del Castellar, la explotación se proyecta en un espacio que dista nueve kilómetros y medio de Abenójar, menos de cuatro de Navacerrada (Almódovar del Campo), y a poca distancia también de Fontanosas (Abenójar-Almodóvar) y Cabezarados, en la comarca suroccidental de Ciudad Real, una de las más despobladas aunque de gran valor medioambiental.