La Confederación Hidrográfica del Guadiana y el Ayuntamiento de Ciudad Real cerraron hoy la entrega del complejo de piscinas e instalaciones deportivas Playa del Vicario.
La ‘playa de Ciudad Real’, que no tiene arena y se nutre de las aguas dulces del pantano, es un complejo de ocio “de lujo” en palabras de la alcaldesa, Rosa Romero, que ya es oficialmente propiedad municipal y abrirá, el momento que todos esperan, “posiblemente a principios de agosto; queremos que sea cuanto antes”, explicó Romero.
La alcaldesa acompañó al presidente de la Confederación del Guadiana, Eduardo Alvarado, y a técnicos de este organismo dependiente del Ministerio de Medio Ambiente en un recorrido por los tres mil metros cuadrados de unas instalaciones concebidas para el disfrute de todo tipo de público, y que son más que una simple piscina pública.
El complejo cuenta con tres piscinas comunicadas y de diferentes profundidades; un edificio para vestuarios, aseos y botiquín integrado en el paisaje del entorno; pistas polideportivas con áreas de juegos infantiles para distintos grupos de edades; aparcamiento y marquesina para el autobús (un servicio pendiente de crear) y áreas ajardinadas y de pic-nic.
La idea es que quien vaya a la playa no sólo se dé un chapuzón y tome el sol, sino que pueda practicar otros deportes y disfrutar de un día de campo y naturaleza.
La alcaldesa también opina que es una excelente alternativa vacacional. “Muchas familias de Ciudad Real y la provincia que por la crisis no puedan salir de vacaciones pueden venir aquí”.
De su gestión y explotación se encargará una empresa privada. Para ello el Ayuntamiento abrió un concurso al que según el concejal de Urbanismo, Francisco Cañizares, han concurrido “cuatro empresas de diferente procedencia”. En unos días el Consistorio procederá a la adjudicación, tras la apertura de plicas, de ahí que la intención sea que a primeros de agosto las instalaciones, con capacidad para 2.500 personas, comiencen a recibir público con una tarifa similar al polideportivo.
La recepción de la playa, que según admitió Alvarado “ha tardado más de lo que nos hubiera gustado”, supone en palabras de la alcaldesa la “culminación de un sueño”, el de su predecesor en el cargo, Francisco Gil-Ortega: “Él tuvo la idea y apostó por recuperar esta zona”, añadió.
Un proyecto territorial
Para Eduardo Alvarado, presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana, el de ayer fue “un momento muy importante”. Con la entrega al Ayuntamiento la CHG, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, pone en manos de Ciudad Real, para el disfrute de sus ciudadanos, unas instalaciones de primer nivel que han costado 5,4 millones de euros, casi tres en el complejo de piscinas y que Alvarado pone como ejemplo de coordinación entre administraciones, además de un gran proyecto para revalorizar un territorio y de “marcado carácter territorial”.
De gestión municipal desde este miércoles, la Playa la ha levantado el Ministerio de Medio Ambiente, ha contado con financiación europea y lleva la supervisión de la Junta.
El convenio entre el Ayuntamiento y la CHG que ha fructificado en la Playa del Vicario se firmó en 2002. Cinco años después, en 2007, las piscinas, en las que se hizo la primera prueba de llenado, se mostraron al público pero diferentes vicisitudes, la más sonada la del año pasado por problemas de adaptación de la depuradora a la nueva normativa han retrasado la apertura.
El Ayuntamiento mantendrá abiertas las instalaciones todo el año para mayor rentabilidad social.