Con dificultades mantuvieron la actividad económica trabajadores y trabajadoras de la provincia de Ciudad Real, que fueron testigos este jueves de la histórica nevada que arropó con su manto blanco esta región poco habituada y preparada a la nieve.
Empleados con alta movilidad, como técnicos de emergencias sanitarias y repartidores, fueron los principales afectados, aunque la mayoría pudieron desarrollar su jornada laboral y mantener los servicios esenciales.
Por las carreteras, afectadas por la nieve cuando la mayoría de los trabajadores estaban ya en sus puestos de trabajo, circularon durante el día menos vehículos, y las calles de las localidades estuvieron más vacías tras el ambiente navideño.
Trabajadores de fibra óptica se despliegan en La Solana y Argamasilla de Calatrava, pero tienen que volver a casa
Recién llegados al ‘tajo’ pilló la borrasca Filomena a los currantes de la provincia. “Conocíamos la predicción meteorológica, pero a veces fallan”, indica Juan Manuel Muñoz, encargado de la empresa Thisis fibra, con sede en Miguelturra.
A las ocho de la mañana salieron siete trabajadores distribuidos en dos equipos en dirección a La Solana y Argamasilla de Calatrava para hacer el despliegue de fibra óptica para diferentes operadores. Sin embargo, entre las 10.30 y las 11, tuvieron que regresar.
Problemas para llegar a los puntos de trabajo no tuvieron los técnicos, sin embargo, pronto la nevada hizo imposible trabajar. “Trabajamos con cables y usamos escaleras, que son superficies resbaladizas, por lo que no podemos asumir riesgos”, señala.
En La Solana hubo menos problemas, porque parte de la mañana empezó con intervalos de agua y nieve, que no cuajó en las calles. En cambio, en Argamasilla de Calatrava, pronto hubo varios centímetros de espesor en la calle.
Sobre las rodaduras de otros vehículos hasta una pedanía de Almodóvar
Por encima de las rodadas producidas por otros vehículos llegó Bárbara Jiménez a La Viñuela, pedanía de Almodóvar del Campo muy cercana a Brazatortas y en medio de la sierra. Es técnica de emergencias sanitarias para la empresa TMS en Ciudad Real.
La sanidad no puede parar pese a los temporales y cuando Bárbara se dirigió a las 8.45 con su ambulancia a recoger a un paciente todavía no habían pasado las quitanieves. “Estaba todo congelado”, admite en Lanza esta malagueña afincada en Puertollano desde hace 20 años.
Este jueves hizo los 3 desplazamientos que estaban previstos, pero algún paciente llegó fuera de hora. “Había que ir muy despacio”, dice. Así pues, en ciertos tramos no pudo superar los 50 kilómetros por hora.
Eso sí, “la estampa ha sido preciosa”. En la provincia “no estamos acostumbrados a estas nevadas”, aunque como bien admite Bárbara, “son días para estar en casa o en el parque, tirando bolas de nieve”.
En el carril izquierdo y sin adelantar desde Tomelloso
Por la zona de Tomelloso estuvo Vladi Popa, otro técnico de emergencias sanitarias para la misma empresa. Fue a las diez de la mañana, en dirección Ciudad Real, cuando vio cómo “todos los vehículos hemos tenido que reducir la velocidad a 70 kilómetros por hora”.
Los quitanieves habían empezado a trabajar a esta hora, una vez que la nieve ha empezado a cuajar, por lo que todavía no había dado tiempo a que abrieran paso. “Fuimos todo el rato por el carril izquierdo sin adelantar”, señala.
Aumentar la distancia de seguridad, reducir la velocidad y tener mucha precaución han sido las claves para sobrellevar la nieve en carretera, confiesa Vladi, que iba con cadenas, una pala pequeña y guantes, “para usar ante cualquier problema”.
Sin duda, pese a las dificultades pudo cumplir con el programa del día, a diferencia de compañeros suyos de Mora o Madridejos en Toledo, que según apunta, “han tenido graves problemas” por la acumulación de nieve.
Vladi reconoce el privilegio de contemplar los campos de viñedos nevados. “Veo el paso de las estaciones por los campos y sin duda es sorprendente contemplar esta nevada, y si no que se lo digan a mis compañeros de Campo de Criptana, que apenas veían los molinos, solo sus aspas”, cuenta.
Como en una isla en medio del océano desde una finca en Pozuelo de Calatrava
Pero no solo han visto sorprendentes estampas invernales los trabajadores que se mueven por las carreteras de la provincia, y si no que se lo digan a José María Cabrera, trabajador de la finca Cañada Real en Pozuelo de Calatrava.
Como una isla en medio del océano amanece la vivienda principal de la finca en medio de campos de cultivo agrícola, dedicados a la viña y al olivo. José María confiesa que nunca había visto ese entorno así.
Sobre las 6 de la madrugada comenzó la nevada en la zona y pasado el mediodía había ya más de 5 centímetros de espesor. El carreterín de Pozuelo a la Virgen de los Santos pasa por la finca y todos los campos estaban “bañados” por los copos.
Cartones y una alfombra roja en la tienda de ultramarinos de Granátula
Menos nieve vio Angelines Gómez, que regenta una tienda de ultramarinos en Granátula de Calatrava, donde la alfombra roja que puso por Navidad ha servido para que la gente no se escurriera al entrar a la tienda.
Poco les importó la nieve a los vecinos del pueblo a la hora de ir a por pan, tomates o tabaco, a pesar de que más de uno ha tenido que aguantar bajo los balcones o paraguas la espera de rigor que existe desde que llegaron las restricciones de la pandemia.
“Aquí no he parado en toda la mañana, hemos tenido mucho jaleo y no podía dejar a la gente en la calle con la nieve y el frío”, confiesa Angelines, al mismo tiempo que señala que en su establecimiento tienen un máximo permitido de tres personas.
Ella estaba expectante y preparó cartones para cubrir el suelo de la tienda, “para que no haya golpes”. Al final, los tejados quedaron blanco, aunque las calles siguieron limpias durante gran parte del día en esta localidad del Campo de Calatrava.
Repartidores y representantes no consiguen llegar a Viso del Marqués
Más problemas hubo en Viso del Marqués, a la espalda de Sierra Morena. Mari Carmen Muñoz, que regenta una droguería, confiesa que por la mañana no pudo llegar un camión que traía productos de primera necesidad como papel higiénico.
Los representantes “tampoco se han arriesgado a venir”, y con uno incluso hizo la reunión por teléfono, donde la mandó las últimas ofertas.
Por la tarde, Mari Carmen confesaba su preocupación, porque tenía previsto que otro camión de reparto salga este viernes desde Pedro Muñoz. “Los mayores problemas están entre los que vienen de la zona de Albacete o que paran en localidades como Almagro”, apuntó.
Después de los días festivos y las vacaciones, ahora con la nevada la droguería nota la falta de lejía de uso alimenticio y productos de desinfección, muy solicitados en estos tiempos de pandemia. La lejía “puede que no venga hasta el lunes”.
Viso del Marqués ha sido una de las zonas más afectadas por la nieve, que ha llegado a cubrir la mayoría de las calles. A las cinco de la tarde todavía nevaba, había nieve en tejados, aceras, encima de los coches y en las vías menos transitadas.
En la sierra hay todavía más nieve acumulada, “hasta más de 20 centímetros”. Ella misma acudió a la casita que tiene en la sierra con unos botines y acabó calada. Ahora, el principal temor son los “hielos” y el frío. Apenas “cuatro personas” salieron a la calle y muchas tiendas ni abrieron en la tarde de este jueves.
