El mundo agrario anuncia movilizaciones ante la situación que atraviesa el sector. Los tres sindicatos mayoritarios, ASAJA, COAG y UPA pretenden ir todos a una para conseguir unos objetivos comunes. La garantía de precios justos, una reducción de la burocracia y las mismas exigencias para las importaciones de países competidores, son algunas de las medidas que plantean, además de reclamar más ayudas para combatir la sequía y la crisis de costes.
“Es muy importante que vaya todo el sector unido porque todos los agricultores, independientemente de las siglas, tenemos los mismos problemas”, asegura el presidente de ASAJA en La Solana, Juan José Díaz de los Bernardos. En declaraciones a la emisora municipal Radio Horizonte, aplaude la unión del sector para revertir esta delicada situación que atraviesan actualmente en España, como en otros países europeos. “Estas movilizaciones son necesarias teniendo en cuenta las restricciones, los recortes en agua y otra serie presiones que estamos sufriendo”, apostilló.
La regulación europea y su impacto sobre nuestra soberanía alimentaria y sobre los precios serán los puntos angulares. Si Francia culpa a España, nuestro país señala a Marruecos. “Los franceses nos acusan de competencia desleal que no es. Los dos estamos en la Unión Europea y tenemos las mismas restricciones, o incluso nosotros alguna más, porque somos frontera con Marruecos y no podemos echar algunas materias activas que ellos si pueden utilizar”.
Sobre el conflicto con el pueblo galo, respeta que se manifiesten, pero no comparte que se ceben con los camiones españoles. “¿Por qué tienen que tirar nuestros productos? Y encima, la policía francesa no hace nada para impedirlo”. Díaz de los Bernardos confesó que siente ‘impotencia’ cuando ve esas imágenes cada día.
A la espera de conocer cómo y cuándo se llevarán a cabo las protestas, que se desarrollarán por todo el país, el campo español seguirá el camino que han emprendido otras naciones del viejo continente. Los bajos precios de los productos, muchas veces por debajo de los costes de producción, es una de reivindicaciones, así como el incumplimiento de la cadena alimentaria. Mención aparte, tiene la Política Agraria Común. “Cada vez tiene más papeleo, más requisitos… y la verdad es que nos han recortado un 30% a cada agricultor”, concluyó.