Ya una vez centrado en La Solana, Paulino Sánchez explicó quien dota el convento, como se fue construyendo, historia de las monjas y evolución del convento que fue fundado en 1593. El convento, según informó Sánchez, data del 5 de agosto de 1593 llegando a lo largo del tiempo monjas de distintos puntos de la geografía española con un total por ejemplo en el año 1935 de dieciséis monjas, que además de dedicarse a la oración trabajaban en la elaboración de dulces como ‘suspiros de monja’, ‘roscas de almendra’, además de realizar tareas de bordado, incluso y según datos aportados en el siglo XVIII, principios del XIX hacían labores de enseñanza “con niñas internas de la nobleza solanera”.
Actualmente “el convento se encuentra en muy buen estado y es precioso”, comenta el cronista oficial de la Villa, con sus diferentes apartados en perfecto estado de conservación, las puertas de las celdas, biblioteca, receptorio, cocinas, claustro, el acceso a la iglesia desde el propio convento “muy bien cuidado con el primor de todo lo que ellas hacen”.
Aunque cada vez son menos las monjas que van quedando y más los conventos que se están cerrando, Sánchez augura buena continuidad con el convento de La Solana, “todo depende eso sí, de las vocaciones”, contando a día de hoy con siete monjas en el convento de este municipio.