Un total de ocho participantes del programa EMPU-G, procedentes de las localidades de Manzanares, Miguelturra y La Solana, han realizado una convivencia en el Campamento de San Juan, en el municipio albaceteño de Riópar. A lo largo de un intenso fin de semana, disfrutaron de una completa experiencia multidisciplinar, dentro de las actividades de Educación de Calle promovidas por este proyecto socio-educativo dirigido a adolescentes.
En pleno corazón del Parque Natural de los Calares del Mundo y de la Sima, perteneciente a la Sierra del Segura, los jóvenes protagonizaron diversas acciones y dinámicas relacionadas con la naturaleza. Una de ellas, fue la ruta senderista por las chorreras del Río Mundo, donde pudieron observar sus espectaculares cascadas de agua tras los recientes temporales de lluvia. También visitaron el emblemático pueblo de Riópar viejo, para recrearse de la belleza de la aldea, las ruinas del castillo y las sensacionales vistas desde la parte alta de la montaña.

La convivencia, más allá de las actividades descritas, sirvió para trabajar el pensamiento crítico, la reflexión, el autocuidado y la autoestima. Para ello, siguieron las indicaciones y técnicas grupales aportadas por una trabajadora social, un psicólogo y un pedagogo, que les acompañaron en todo momento. Los profesionales, han destacado la distensión, la diversión y el contacto a través de otros juegos donde pudieron incidir en la importancia del buen uso del tiempo libre.
La convivencia estuvo organizada por la Asociación POKHARA y financiada por el Cuerpo Europeo de Solidaridad, tras ser aprobado el proyecto denominado ‘Puentes Invisibles’. Esto ha propiciado también la puesta en marcha de otro proyecto piloto en la localidad de Manzanares con la participación de una decena de hombres. Entre los objetivos, se está haciendo hincapié en diversos aspectos como las adicciones, la gestión emocional, límites y respeto, liberación de la culpa y la vergüenza, o relaciones de pareja, entre otros.