El vestíbulo del teatro ‘Tomás Barrera Saavedra’ acogió la primera jornada profesional de la feria agroalimentaria ‘Saborea La Solana’. Media docena de expertos en la materia ofrecieron ponencias relacionadas con el presente y el futuro del sector, intentando dar luz al puñado de empresarios que acudieron como espectadores. Se trataba de acercarles la realidad de un momento que pide estar atentos a los vaivenes de los mercados, y que exige subirse al carro de las innovaciones, que no paran de producirse. La actividad fue retransmitida en streaming, por La Galana TV y radiada en directo por Radio Horizonte-La Solana.
La alcaldesa, Luisa Márquez, abrió las jornadas, junto al concejal de Promoción Económica, Santiago López. También intervinieron los presidentes de la cooperativa vinícola Santa Catalina, Pedro José Martín-Zarco, y de la cooperativa panadera Rosa del Azafrán, Pedro Ignacio Salcedo, además del secretario general de FECIR (Federación Empresarial de Ciudad Real), David Plaza. Todos valoraron la oportunidad de esta jornada, a fin de formar e informar al empresariado de la agroalimentación. Ha sido una de las grandes novedades de esta segunda edición de ‘Saborea La Solana’.

La primera ponencia disertó sobre cómo crecer competitivamente en el mercado nacional e internacional. Javier González y María José Bados, socios de la asesoría Unomasdos, acercaron la manera de mejorar la gestión de la empresa y su camino hacia la consecución de objetivos, tanto patrimoniales como personales, y la búsqueda de inversores financieros. A continuación, Noelia Sierra habló sobre la digitalización en el sector, un desafío que ya es presente. Como una de las mayores expertas del mundo en la red profesional Linkedin, instó a aprovechar las posibilidades de las redes sociales y a desterrar la palabra “imposible” del vocabulario de un empresario, sea grande o pequeño.
Después de un refrigerio, la jornada se reanudó con una interesante conferencia a cargo de Francisco Santos, socio fundador de Inkiele, una importante conservera con sede en Socuéllamos (Ciudad Real). El empresario resumió su trayectoria vital, con varias caídas y reapariciones. Todo un ejemplo de emprendedor resiliente, que acabó triunfando en el sector de las conservas, ya que su empresa arrancó con lo puesto y ahora tiene más de 100 empleados y un mercado global. La última ponencia la ofreció Sofía González, directora de calidad del grupo Solisyon, consultora que ofrece soluciones integrales a la empresa. Ahondó en la importancia de la seguridad alimentaria, la trazabilidad o la protección de datos y las garantías de calidad.