La suspensión temporal de la caza de la tórtola europea supondrá una gran oportunidad para poder desarrollar nuevos estudios científicos esenciales para la puesta en marcha de un plan de gestión nacional de la especie.
Así lo han asegurado este domingo fuentes del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC) que lleva tiempo investigando la ecología de la tórtola europea y las condiciones que permitan su posible aprovechamiento sostenible.
La Comisión Estatal para el Patrimonio Natural y de la Biodiversidad se reunió el jueves 4 de febrero de 2021 para tratar la propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico de incluir a la tórtola europea en el Catálogo Español de Especies Amenazadas en la categoría de vulnerable, lo que habría supuesto su consideración como especie no cinegética.
Las comunidades autónomas no apoyaron mayoritariamente la propuesta, pero muchas expusieron una alternativa consistente en declarar una moratoria temporal a su caza hasta lograr su recuperación poblacional y poner en marcha un plan de recuperación de la especie.
Actualmente, el IREC lidera un proyecto para desarrollar un mecanismo de gestión cinegética adaptativa de la tórtola, por encargo de la Comisión Europea y en colaboración con organismos de investigación de España, Francia y Portugal.
Este trabajo incluye el desarrollo de un modelo poblacional para cada vía migratoria en Europa, basado en la mejor información científica disponible, que se utilice como herramienta para la toma de decisiones sobre la regulación cinegética.
Este modelo indica que las variaciones de supervivencia tienen más impacto en la evolución de las poblaciones que las variaciones en productividad.
Por ello, una suspensión temporal de la caza de la tórtola europea representará una oportunidad “extraordinaria” para desarrollar estudios científicos esenciales para una mejor comprensión futura de la eficacia de las medidas de regulación cinegética.
Por ejemplo, permitirá evaluar cambios en la supervivencia de los individuos en la ausencia de caza y, por tanto, cuantificar el impacto de la caza, así como conocer hasta qué punto la mortalidad por caza es aditiva o compensatoria con respecto a otras causas de mortalidad.
El IREC desarrolla desde 2018 un programa de anillamiento (captura-marcaje-recaptura) para la monitorización de la supervivencia individual de la tórtola europea en dos zonas de estudio de Castilla-La Mancha, en paralelo con estudios realizados desde el mismo año en Cataluña por el Centre de Ciencia i Tecnología Forestal de Catalunya (CTFC), y por la Office Française de la Biodiversité (antigua Office National de la Chasse et la Faune Sauvage) desde el año 2000.
Sería interesante ampliar este tipo de estudios en España durante el periodo de suspensión para contribuir a este trabajo, han precisado las fuentes.
El IREC también desarrolla varios proyectos de investigación sobre la tórtola europea que contribuirán al diseño de medidas de recuperación más allá de la regulación cinegética, por ejemplo, mediante propuestas de gestión del hábitat, así como a la evaluación científica de su eficacia.
Estudian también factores que afectan a su reproducción y su supervivencia, la relación entre abundancias y hábitat, o los movimientos que realizan durante y después de la reproducción para elegir zonas de alimentación adecuadas.
Este conocimiento va a resultar fundamental para la elaboración del plan de gestión nacional, en cuya necesidad coinciden tanto el Ministerio como las comunidades autónomas.