Aurora Galisteo / Ciudad Real
Los alojamientos rurales de la provincia han rozado el lleno en Semana Santa, confirmando que el turismo rural es una gran opción en estas fechas.
Así, todas las casas rurales consultadas por Lanza, en El Robledo, Huertezuelas, Herencia, Ruidera o Infantes, entre otros lugares, han estado completas entre el Jueves Santo y el Domingo de Resurrección, un dato muy similar al registrado durante el pasado ejercicio y que supone un pequeño bálsamo para un sector muy castigado por la crisis.
Y es que el principal problema del sector es la falta de continuidad. Semana Santa suele ser una buena época, la mejor, afirman algunos, pero el reto es prolongar las estancias, algo que, de momento, se antoja complicado.
Sea como fuere, los alojamientos de turismo rural de la provincia han rozado el lleno este pasado puente y eso siempre implica “satisfacción”. De hecho, las reservas se hicieron en muchos casos con meses de antelación, la mayoría de las consultadas están reservadas desde octubre de 2015, aunque “siempre hay reservas de última hora”.
En la provincia de Ciudad Real el turismo rural vinculado a la Semana Santa es fundamentalmente de dos tipos: familias y grupos de amigos, aunque cada vez se ve una mayor incidencia del turismo de pareja. Eso sí, en este último caso, las opciones suelen ser apartamentos rurales o, en todo caso, habitaciones, vista la dificultad de alquilar una casa entera. Obviamente, se trata en la mayoría de los casos de turismo nacional.
A partir de ahí, la Semana Santa se ha presentado con pocas o casi ninguna novedad respecto al último ejercicio.
Nazaret Gómez regenta la casa rural Doña Jimena en El Robledo desde hace tres años. Ella también ha colgado el cartel de “completo”, al igual que las 17 casas rurales que existen en este bonito pueblo.
Explica que las reservas para Semana Santa se hacen con mucha antelación y que las familias y grupos que se desplazan hasta El Robledo “lo hacen buscando naturaleza, campo y salir de la rutina”.
En términos similares se pronuncia Rosa Gómez, propietaria de la Finca Montón de Trigo en la pedanía calzadeña de Huertezuelas, una casa en pleno campo que lleva abierta diez años.
“La Semana Santa es la mejor época para el turismo rural”, añade Gómez quien asegura que en estos diez años de andadura siempre ha colgado el cartel de completo.
María Gómez, gerente del Cortijo Sierra La Solana, en Herencia, ha tenido durante todo el puente un grupo grande de personas. Indica que Semana Santa, junto con las navidades, son las mejores épocas del año.
Ruidera
En el pueblo de Ruidera hay seis casas rurales y todas han estado completas durante el largo puente de Semana Santa. Así lo ha indicado a este periódico Emiliano Oliver, propietario de La Torca, quien añade que el grado de ocupación de las que hay situadas en el parque natural también ha sido muy elevado.
Semana Santa y agosto son las fechas preferidas por los amantes del turismo rural para acercarse hasta Ruidera atraídos, sin duda, por las lagunas y su entorno.
En Villanueva de los Infantes, uno de los pueblos de la provincia de Ciudad Real que más turismo atrae, la Semana Santa ha sido también muy buena y las diez casas rurales que hay en el pueblo han tenido una ocupación del cien por cien.
Así lo ha indicado a Lanza Rosa González Parra, propietaria de La Casona del Abuelo Parra, quien incide en que son, sobre todo, familias y grupos de amigos, aunque también turismo de pareja, los que se animan a visitar este bonito pueblo.
Por último, destacar que también en Alhambra y San Carlos del Valle la ocupación ha sido del cien por cien. Así lo explica Paqui Torres, propietaria de La Huerta del Bao, en Alhambra, desde el año 2012 quien asegura que el turismo rural va en aumento.
