A Lucía Escudero, secretaria de la asociación Milenrama -la más joven de las que existen en la provincia porque se han constituido este mismo año aunque los trámites empezaron antes-, no le cuesta reconocer que hace un año ni siquiera pensaban que era posible constituir una asociación de estas características en Socuéllamos, pero el 8-M de 2018 -que fue una auténtica marea violeta en todo el país- cambió completamente su perspectiva.
“Cuando el año pasado vimos que había muchísima más gente de la esperada en la convocatoria que una asociación de mujeres -no específicamente feminista- hizo el 8-M, nos dimos cuenta de que era posible y necesaria una asociación feminista para trabajar por el empoderamiento de las mujeres, en cualquiera de sus aspectos”, explica Lucía Escudero en una entrevista con Lanza.
Y dicho y hecho. Aunque no eran muchas, no dudaron en ponerse a trabajar intensamente, poniendo su tiempo y su dinero, para dar forma y crear la asociación feminista Milenrama justo para una nueva jornada reivindicativa del 8-M en el que, además de asumir las reivindicaciones del colectivo feminista provincial -que no dejan de ser las de las mujeres del país-, se centran en abordar de una forma especial a reivindicar el papel de la mujer rural en todos sus aspectos.
En este sentido, las Milenrama apuestan por visibilizar el papel de la mujer en el campo y trabajar también por acabar con estereotipo como que las mujeres que trabajan en la agricultura o la ganadería son menos femeninas porque se mueva en un mundo de hombres, “porque el trabajo no influye en como cada una quiere ser o es”, al tiempo que ponen en valor que las mujeres están perfectamente capacitadas para hacer el mismo trabajo que un hombre.
Algunos avances a pequeños pasos
Mientras, lo cierto es que las Milenramas sí se muestran satisfechas del avance en los últimos tiempos -“aunque lejos aún de los objetivos de igualdad por los que luchamos”- y Lucía Escudero reconoce que hay mucha más conciencia de lo que es el feminismo en muchos más ámbitos.
“Por ejemplo, yo el año pasado sí que estaba un poco metida en todo el tema muchas jóvenes de Socuéllamos no tenían tanta idea y a través del trabajo que vamos haciendo se dan cuenta de cosas que ocurren y de las que no eran conscientes que suponen una desigualdad clara hacia ellas”, destaca Escudero.
Y en esa línea de información es en la que van a seguir haciendo hincapié porque reconoce que en su pueblo hay varias empresas “bastantes grandes” donde “la mayoría de los que trabajan son hombres, pero vamos a intentar que las hay conozcan los derechos que pueden ejercer, que a mismo empleo debe haber mismo salario…”.
Sin embargo no todo el proceso de constitución de la asociación ha sido tan sencillo porque, reconocen, tenían cierto “temor” a crearla porque en los pueblos siempre hay una mentalidad algo más conservadora y pensaron “vamos a ser las señaladas, las locas, las feministas”.
Pero, aunque no es todo sencillo, han trabajado para explicarlo todo de forma sencilla, “porque lo único que queremos es que todo el mundo se entere de lo que es el feminismo. Hay mucha gente que todavía no lo sabe, que todavía no lo entiende o que lo ve por la tele pero no se para a pensar no lee para ir más allá”.
Y la acogida que en la presentación tuvo la asociación fue muy buena “y se demuestra que si explicas las cosas bien pues la gente lo entiende. Es cierto que, de primeras, hay mucha gente un poco más mayor que no está puesta, y más en los términos: por ejemplo, feminismo les suena a lo contrario del machismo y hay que explicarlo con claridad”.
Para continuar esa pedagogía que hacen en su día a día, también va a aprovechar el 8-M y van a acercarse a los institutos a informar a los chavales, organizaron un taller de pancartas, han convocado una concentración en la Plaza de la Constitución y un concurso de fotos “y en vez de poner premio en metálico, hemos pensado que van a ser un par de libros feministas para que la gente se anime a leer, que también es algo que se está perdiendo. Y al final también estás regalando feminismo para que la gente tenga más pensamiento crítico”
Unas actividades que marcarán el primer 8-M de las Milenrama, una asociación cuyo nombre tiene una bonita historia: es el de una planta de la que, de un único tallo, nacen muchas flores “como las mujeres, que venimos de la misma raíz y buscamos el mismo objetivo de la igualdad. Además, entre otras muchas propiedades, esta planta era especialmente femenina porque se utilizaba para los desarreglos y dolores menstruales, explica Lucía Escudero.