Las seis águilas imperiales que fueron encontradas muertas el 12 de enero en la finca «La encomienda de Mudela», en la provincia de Ciudad Real, sufrieron un envenenamiento producido por el producto Aldicarb.
El informe toxicológico emitido por el laboratorio de toxicología del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC) -organismo mixto de investigación entre la Universidad de Castilla- La Mancha, el Centro Superior de Investigaciones Científicas y la Junta de Comunidades- ha confirmado que el envenenamiento fue la causa de la muerte de las seis águilas imperiales.
La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha ha indicado en un comunicado que Aldicarb es el mismo producto que fue encontrado en una finca particular en el paraje denominado «El Peñón», una parcela cercada de unas 15 hectáreas y que mantiene un pequeño aprovechamiento ganadero.
Toda vez que la actual legislación considera que este hecho es un delito penal, e independientemente de las acciones administrativas que procedan, la Consejería de Agricultura se personará como acusación particular en el proceso judicial que se desarrollará ante este «lamentable hecho».
Los cadáveres de las seis águilas imperiales, una especie declarada en grave peligro de extinción, se encontraron en la finca «La Encomienda de Mudela» propiedad del organismo autónomo Parques Nacionales -dependiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente- y ubicada en el término municipal de Viso del Marqués.