Agentes medioambientales de Castilla-La Mancha han localizado un ejemplar de águila imperial ibérica electrocutada en el suroeste de la provincia de Ciudad Real (estribaciones de Sierra Morena). Un agente se hizo cargo hace unos días del cadáver, tras el aviso de un particular, y lo trasladó al centro de recuperación de fauna salvaje El Chaparrillo.
La necropsia ha confirmado la muerte por electrocución de un águila imperial de unos tres o cuatro años. El águila imperial ibérica es una especie catalogada en peligro de extinción en Castilla-La Mancha y el resto del territorio nacional, y la electrocución una de las principales causas de muerte de estas aves y de muchas otras especies, confirman fuentes de los agentes medioambientales.
Inspección de tendidos eléctricos
El estado de alarma no ha impedido a los agentes seguir haciendo su trabajo “de protección y custodia” del medio natural. Una parte de esas inspecciones se centran en localizar tendidos eléctricos y puntos negros con restos de aves y algún mamífero. En esos casos se levanta acta y se comunica a la compañía eléctrica para que los subsane.
“Los ciudadanos no pueden tocar los restos”
“Los ciudadanos no pueden tocar los restos que encuentren pues alterarían las pruebas que determinarán la causa de la muerte, si los encuentran deben solicitar la presencia de los agentes medioambientales para el levantamiento y la custodia del cadáver”, aseguran los agentes.
220 parejas nidificantes de águila
Castilla La Mancha cuenta con 220 parejas nidificantes de águila imperial según el censo de 2018, lo que supone el 60% de la población nacional y el 40 % de la mundial, “gracias al trabajo de administraciones y propietarios de fincas particulares va en aumento”, explican los agentes medioambientales que piden a la ciudadanía que colabore con la conservación de especies llamando al 112.