Celia García-Ceca
Malagón
María del Pilar Gomiz Pascual presentó el viernes su libro «Visibilizar la discapacidad. Hacia un modelo de ciudadanía inclusiva». El lugar elegido fue el Centro Cultural de Malagón, el pueblo de su otra familia, la de los amigos.
Licenciada en Periodismo y, actualmente, profesora y secretaría adjunta a la facultad de Sociología en la UNED, en su primer libro Pilar habla del respeto a la discapacidad: «Este libro habla del respeto al contrario» a lo que añadió «Respeto que se olvida porque si la gente tuviera respeto a la ciudadanía, libros como este no serían necesarios».
Pilar asegura que el objetivo del libro se cumplió la tarde del viernes. Su libro nace del compromiso que asumió cuando le encargaron realizar un trabajo de investigación sobre discapacidad. Una investigación costosa porque «no hay información sobre la discapacidad y, mucho menos, sobre las mujeres con discapacidad». Poniendo el enfoque en las mujeres, para su trabajo estudió a más de 54 mujeres con alguna discapacidad. Gomiz asegura que «las personas con discapacidad necesitan un hueco en la sociedad». Necesidad que se debe traducir a la idea de romper las barreras que impone la sociedad a las personas con discapacidad. «Hay que ser capaz de ver la situación de las personas y sus posibilidades» dice Pilar a lo largo de la charla.
Gomiz defiende que hay que poner el énfasis en la sociedad y reconoce que ella es la verdadera responsable de que, a veces, se discapacite aún más a la persona poniendo barreras para que no tenga todas las posibilidades para desarrollarse. Habla de romper esas barreras para incluir a las personas con discapacidad en todas las partes de la sociedad, «y en las que no puedan entrar por sus necesidades, habrá que evitar las barreras que se establecen por la falta de conocimiento de las necesidades de la persona que tenemos al lado».
Asegura que son más de 4 millones las personas que en España sufren algún tipo de discapacidad pero que al constituir un grupo pequeño, sus votos no cuentan y no son escuchados haciendo que la política no se enfoque a ellas. «Hay que hacer sus problemas el de todos. Nadie está libre. Cualquiera de nosotros mañana puede ser una persona con alguna discapacidad» asegura Pilar.