J. Yébenes
Ciudad Real
La pérdida de poder adquisitivo de los ciudarrealeños tras la jubilación se sitúa en el 36,8 por ciento, a tenor de la variación entre el salario de un trabajador en activo -con una media de 20.363 euros al año- y la pensión que cobran al dejar la vida laboral, que alcanza los 12.857 euros de media.
Los datos pertenecen a un estudio de la compañía Aviva Vida y Pensiones, en el que calcula, según datos del INE, los ingresos que tendrán de los castellano-manchegos para mantener el nivel de vida antes y después de completar el periodo de cotización.
Los jubilados de la provincia se sitúan en segundo lugar respecto a los que tienen menor pérdida de poder adquisitivo, después de los Guadalajara, con un 30,6 por ciento de descenso de su renta tras la jubilación (de 20.363 euros a los 14.125 euros), mientras que los que mayor pérdida registran son los de Cuenca, con hasta un 44 por ciento de bajada en los ingresos que perciben por dicho concepto.
En Ciudad Real, según Aviva, la pensión media mensual es de 918,34 euros, ligeramente por encima (32,84 euros) por encima de la media regional situada en los 885,50 euros.
Respecto a las otras provincias de la región, la ciudarrealeña registra la segunda pensión media más alta, tras Guadalajara, con más de 1.008 euros, mientras que Toledo se sitúa en los 879 euros, Albacete en los 837, y Cuenca en los 808.
En Castilla-La Mancha hay 201.000 personas cercanas a la jubilación, por lo que desde Aviva Vida y Pensiones aconsejan negociar un plan de pensiones con el fin de corregir la pérdida de poder adquisitivo tras su jubilación.
Precisamente es a final de año, en concreto en estos últimos meses, cuando se contratan el 70% de las contrataciones a planes de pensiones.
Sus cálculos apuntan a que el volumen de aportaciones a planes de pensiones en Castilla la Mancha sólo representa el 0,55 por ciento del PIB de la comunidad.