Con un total de 1.102 vehículos matriculados en lo que llevamos de año, un 50% menos que en 2019, los concesionarios de automóviles de la provincia de Ciudad Real han reabierto volviendo a su actividad comercial habitual con la llegada de la fase 1 de la desescalada. Una nueva apertura que afrontan con bastante “incertidumbre”, pues la situación económica actual hace temer lo peor.
“Nos gustaría que la gente siguiera pensando en consumir y renovar sus vehículos, pero desgraciadamente la situación invita a no tener muchas esperanzas en que esto se recupere de manera inmediata”, señala a Lanza el jefe de ventas del concesionario Nissan Mecoval de Ciudad Real, Jacobo García. Desde este lunes, fecha en la que pudieron abrir de nuevo los concesionarios tras más de dos meses cerrados, García indica que “no ha habido muchas visitas”, aunque sí han sido notables las consultas telefónicas y por correo electrónico.
Hasta antes de la llegada del COVID-19, las expectativas de venta previstas para este 2020 eran mantener las cifras que del anterior año, algo que será difícil, después de haber perdido el mes de abril por completo y medio de marzo y mayo. “Marzo ha sido un auténtico desastre, en abril ha caído el mercado un 98%, en mayo las expectativas están en torno a un 80% de descensos y a nivel anual esperamos unas caídas de ventas de alrededor del 50%, con respecto al anterior año”, lamenta el jefe de ventas de Nissan Mecoval, quien cree que la recuperación en el sector no llegará hasta el próximo 2021.
Algo más optimista se muestra José Manuel López, jefe de ventas del concesionario KIA Fermamovil de Ciudad Real, quien ha destacado que también están teniendo consultas a través de teléfono, pero las visitas a la exposición han bajado bastante. En cuanto a las expectativas de venta, está convencido de que “no llegaremos a las cifras que estábamos teniendo los dos primeros meses del año, pero veo un futuro positivo después de las citas previas que estamos concertando y las llamadas que están haciendo potenciales clientes”.
Descuentos de hasta 6.000 euros para incentivar el consumo
Los responsables de ventas de ambos concesionarios coinciden en que ante la situación de incertidumbre, las marcas automovilísticas están poniendo en marcha políticas de precio muy agresivas con descuentos que pueden llegar hasta 6.000 euros, en el caso de Nissan. Unas rebajas que desde ambos concesionarios creen que podría incentivar las ventas de los próximos meses.
Ayudas del estado
Tras la difícil situación que han atravesado los concesionarios y fabricantes de vehículos durante los meses de marzo, abril y mayo, éstos insisten en la conveniencia de que se apruebe cuanto antes el plan de ayudas que el Gobierno está abordando con fabricantes y vendedores de vehículos. “Necesitamos un tipo de subvención, como la que ya hubo del plan PIVE, para ayudarnos a incentivar las compras”, destaca el jefe de ventas de KIA.
Talleres con largas listas de espera
Lo que sí está funcionando francamente bien son los talleres precisan desde ambos concesionarios. En el caso de Nissan, la lista de espera para su taller “puede ser fácilmente hasta el 15 de junio”, ya que han sido “dos meses con los vehículos parados y ésto afecta a su mecánica”.