Los pantanos de la cuenca alta del Guadiana siguen recuperando nivel: dos hectómetros cúbicos más en la última semana de vuelta al invierno y chaparrones tormentosos, que han dejado las reservas al 53% de la capacidad total, con 219 hectómetros cúbicos almacenados, dieciséis puntos porcentuales por encima de la primera semana de mayo de 2017.
Los pantanos de la Torre de Abraham, al norte de la provincia, y Peñarroya, en La Mancha, son los que más han subido de nivel esta semana, precisamente de los que más hectáreas de regadío dependen.
Sin llegar a la mitad de su capacidad, el embalse de la Torre de Abraham almacena algo más de 88 hectómetros cúbicos (está al 48%) mientras que Peñarroya, que depende del acuífero del Campo de Montiel y la escorrentía de las Lagunas de Ruidera, embalsa 28 hectómetros y supera ya el 55% de su capacidad, según datos difundidos este lunes por la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG).
El Gasset almacena 32 hectómetros
El pantano de Gasset, que ha pasado en dos meses de recibir agua a desembalsarla, almacena algo más de 32 hectómetros (cerca del 90% de su capacidad). Por el agua que ha aliviado el Gasset el pantano de El Vicario, en el entorno de Ciudad Real capital acumula 23,5 hectómetros.
En peor situación se encuentran los embalses de La Cabezuela (18), Vega del Jabalón (12) y Puerto de Vallehermoso (6), aunque con suficientes reservas como para que no haya problemas de abastecimiento veraniego en sus respectivas comarcas.