Numerosos fieles se dieron cita en la tarde del domingo en la parroquia de San Juan Bautista de la Concepción, para asistir a la toma de posesión de los nuevos sacerdotes. El párroco Óscar Casas y el vicario Feliciano, regirán desde ahora la Unidad de Acción Pastoral formada por la propia parroquia solanera y las de San Carlos del Valle y Pozo de la Serna.
La misa comenzó con la lectura que realizó Antonio Naranjo del decreto de nombramiento, en el que se indica que se debían hacer cargo de los libros parroquiales y el resto de documentos para enviar acta al Obispado. Seguidamente, el arcipreste de la Zona Mancha Este era el encargado de tomar juramento al párroco y al vicario.
Tras la lectura del Evangelio, el párroco Óscar Casas pronunciaba la homilía, agradeciendo en primer lugar la presencia en la toma de posesión de compañeros sacerdotes, como el párroco de Santa Catalina, Benjamín Rey, así como antiguos párrocos del Convento como Manuel Infante y Javier García de León, además de otros compañeros sacerdotes.
Asimismo, tuvo palabras de agradecimiento para sus familiares que estaban presentes, además de seminaristas y fieles de los diferentes pueblos en los que había ejercido su ministerio como Las Casas, Herencia y Puerto Lápice, además de los solaneros, cristeños y del Pozo que habían acudido a la celebración.
Destacó que el altar donde se celebraba la misa no sólo contaba con una cruz parroquial, sino con tres, pues además de la de la propia parroquia, estaban las del Santo Cristo y Virgen del Carmen, de San Carlos del Valle y Pozo de la Serna.
Precisamente centró su intervención en lo que representan esas tres cruces. De la de San Carlos del Valle, lo hizo señalando que ofrece la universalidad de Cristo, aludiendo a las peregrinaciones que había recibido esa población.
La figura de Cristo está presente, dijo, en la veneración que se tiene en La Solana todos los viernes en torno a la tradición de besar el pie a Jesús Rescatado, que incluso realizan viernes tras viernes personas que no están relacionadas con la vida parroquial.
Sobre la cruz del Pozo de la Serna, representada por su parroquia dedicada a la Virgen del Carmen, destacó la humildad de la más pequeña de las poblaciones de la Unidad Pastoral, que tan bien está representada en la figura de la Virgen María. Indicó que en ella estamos todos llamados a vivir en la sencillez, cuando lo que se va buscando es lo contrario, agarrarse a las riquezas del mundo.
Sobre la cruz de la parroquia que da nombre a la Unidad Pastoral, recordó la figura del titular San Juan Bautista de la Concepción, leyendo un pasaje de una de sus obras en la que señala la importancia de ser fiel en las cosas pequeñas, porque quien lo es en lo pequeño, lo es asimismo en lo grande.
Señaló a La Solana como pueblo fiel y trabajador, destacando asimismo la importancia de trabajar en lo pequeño, en lo que no se ve, como lo hacen tantos grupos que lo hacen en las parroquias, aludiendo a la que señalaba San Juan Bautista de la Concepción sobre la fidelidad en las cosas de poca consideración.
Continuando con la celebración, el nuevo párroco, junto con el arcipreste, pasaron por el sagrario, la pila bautismal, el confesionario y la sede del altar mayor, recibiendo asimismo las llaves de la parroquia.
Durante la celebración intervino el coro parroquial, que concluyó con el Himno a la Virgen de Peñarroya, ofreciéndose posteriormente una invitación en la Lonja del templo que fue preparada por los diferentes grupos parroquiales.
