A. R.
Ciudad Real
El Belén Municipal, montado en el antiguo Casino por la Hermandad de Pandorgos, fue inaugurado ayer con la bendición del vicario general, Miguel Esparza, quien pidió a Dios que en la representación de este Nacimiento sea “nuestro vecino y acompañante más importante” y “nos ayude a celebrar más intensamente la fiesta de la Navidad”.
Esparza, que pidió por la protección de la ciudad, deseó en su bendición que las imágenes del Nacimiento “nos ayuden a celebrar la Navidad con alegría” y ver a Cristo presente en todos los que necesitan amor. Tras sus palabras, intervino el presidente de la Hermandad de Pandorgos, Agustín Cantero, que resaltó el cariño e ilusión con el que se ha montado el Belén Municipal, así como la responsabilidad de saber que es un Nacimiento emblemático que contribuye año tras año a preservar esta tradición entre los ciudarrealeños.
Tanto a Esparza por su bendición como a los Pandorgos por el esfuerzo realizado para instalar el Belén, mostró sus agradecimientos la alcaldesa, Rosa Romero, que calificó de “majestuoso” el Nacimiento que acoge el antiguo Casino, espacio que se convierte todas las Navidades en uno de los lugares más frecuentados por ciudarrealeños y visitantes.
Romero, que recordó que la pasada semana se inauguró la iluminación navideña, que puede corresponderse con la parte más lúdica, resaltó que con la apertura del Belén Municipal del antiguo Casino se da el pistoletazo de salida a la llegada de la Navidad, desde el cariz más tradicional y que conecta con la razón de ser de estas fiestas.