Los trabajadores de la fábrica de Vestas en Daimiel se han plantado ante la empresa porque consideran que las medidas tomadas para prevenir el contagio por coronavirus son “insuficientes”. Desde las cuatro de la madrugada, la producción está parada. La incertidumbre por posibles casos de Covid-19 reina entre la plantilla.
El presidente del comité de empresa, Willy Cuero, ha informado a Lanza que la parada ha comenzado este martes con los trabajadores del turno de noche. A las siete ha entrado el nuevo turno, y en estos momentos los operarios de producción están en sus puestos, pero sin actividad.
La protesta ha nacido de los mismos trabajadores, entre los que ha cundido el malestar desde el fin de semana. Está respaldada por la plantilla de operarios de producción al completo, tanto fijos como de ETT: alrededor de 800 personas entre los dos turnos. Entre ellos no están los trabajadores de las oficinas, que han tenido opción al teletrabajo.
Consideran «imposible» mantener las recomendaciones sanitarias
En los últimos días la fábrica de palas eólicas ha aplicado diferentes medidas para la reducción del riesgo de contagio. Sin embargo, el comité de empresa señala que “es imposible mantener las recomendaciones del Gobierno, porque en cada una de las cadenas de producción estamos todos juntos, no hay un metro de distancia de seguridad”.
Además, informan de que en los vestuarios están todos juntos, que la limpieza no es suficiente y que en los cambios de turno coincide la plantilla al completo. En un comunicado, el comité de empresa denunció este lunes también que no había limpieza en la cantina entre turnos y que faltaban desinfectantes.
Al menos 14 personas están en aislamiento
El nerviosismo ha aumentado tras conocer que algunos compañeros no han pasado los controles de temperatura establecidos por la empresa –tienen que dar un máximo de 37,5 grados- y que hay personas que han estado en contacto con casos positivos. Willy Cuero señala que “tenemos constancia de que al menos 14 personas están en aislamiento en sus casas a la espera de la valoración de los sanitarios”.
Ante esta situación, el comité de empresa destaca que “la preocupación no solo deriva del trabajo en sí, sino de la responsabilidad que tenemos con nuestras familias en nuestras casas”. “El nivel de angustia y de pánico va en aumento, porque hay personas que conviven con gente muy vulnerable, y al no tener certidumbre de que las medidas son las adecuadas, el riesgo es inminente en sus casas”, añade.
Reunión con la empresa a lo largo de la mañana
El comité de empresa considera que “debe prevalecer la salud de los trabajadores y la familia frente a la producción”, por lo que “si la empresa no puede tomar más medidas para mitigar el contagio, una de las opciones es el cierre de la fábrica”.
Entre las 11 y las 11.30, la dirección de la empresa ha convocado al comité a una reunión, donde tratarán estos asuntos, por lo que se esperan novedades. A las ocho y media de la noche todavía continúa la negociación.
(Habrá ampliación)