El verano está incompleto sin las carreras en las calles de los niños saharauis y sin el abrazo de solidaridad de las familias de la provincia de Ciudad Real a través del programa Vacaciones en Paz. Las risas han empezado a sonar este martes en las instalaciones del Colegio Divina Pastora de Manzanares.
El presidente de la Diputación, José Manuel Caballero, acompañado del alcalde de Manzanares, Julián Nieva, el diputado David Triguero y representantes de la Asociación Provincial de Amigos del Pueblo Saharaui, han acudido a la recepción oficial de los 120 niños procedentes de los campos de refugiados de Tinduf que pasarán los meses estivales en Ciudad Real.
La Diputación destina 350.000 euros al año al pueblo saharaui
A la cabeza en recepción de niños de toda Castilla-La Mancha, la provincia manifiesta un año más su “compromiso” con los que peor lo pasan, también fuera de las fronteras españolas. José Manuel Caballero ha destacado que Vacaciones en Paz responde al “principio de solidaridad y fraternidad de los pueblos”, en estos tiempos de crisis humanitaria por las migraciones.
La Diputación de Ciudad Real destina al pueblo saharaui 350.000 euros cada año, a través de los envíos de alimentos, el programa sanitario, las prácticas de profesores en el extranjero y del pago de los desplazamientos de los niños de entre 7 y 11 años en su mayoría que participan en Vacaciones en Paz.
El objetivo de esta inversión por parte de la Diputación, que es una de las pocas administraciones o la única en España que hoy costea estos viajes, es “que la acogida sea menos gravosa para las familias”.
Cuarenta y dos pueblos de la provincia, casi la mitad, participaran en la acogida, y las áreas de mayor recepción corresponden con las más pobladas: Ciudad Real, Puertollano, Alcázar de San Juan, Valdepeñas y Manzanares.
Casi un 1% del presupuesto dirigido a cooperación internacional
El presidente de la Diputación ha indicado que en total la Administración provincial destina 1.050.000 euros a la cooperación internacional, “casi un 1 por ciento del presupuesto”, lo que no impide “atender a los de aquí”, a través de las ayudas de emergencia o los planes de empleo en coordinación con la Junta de Comunidades y los ayuntamientos.
A través del programa Vacaciones en Paz, ganan los niños saharauis, que evitarán las temperaturas superiores a los 50 grados del verano en los campamentos, tendrán una alimentación rica en verdura y lácteos, y pasarán chequeos médicos, sino también los ciudarrealeños, a través de la interculturalidad.
Tras agradecer el “esfuerzo” del voluntariado de Cruz Roja, la asociación Talayot y Protección Civil que han participado en la recepción, Julián Nieva ha expresado por su parte el compromiso con la causa de los saharauis, que durante tantos años han acudido a Manzanares.
Asociaciones implicadas esperan revertir la disminución de acogidas
Por su parte, los representantes de la Asociación Provincial de Amigos del Pueblo Saharaui, Silvestre del Río y Paco Real, y el representante saharaui Abdehale Amed, han agradecido el compromiso de la Diputación con Vacaciones en Paz, “sin el que este programa no sería posible”.
“Es importante que los niños puedan pasar el verano en La Mancha, que lleguen con sus mochilas cargadas de esperanza, y se vayan con ilusión, afecto y cariño”, han añadido en declaraciones a los medios de comunicación.
Asimismo, los colectivos han deseado que la provincia vuelva a recuperar las cifras de acogida que tuvieron hace años, con hasta 260 niños saharauis en el programa. La crisis económica y los cortes de edad marcados han reducido el número de niños en Vacaciones en Paz, hasta tal punto que este año en Ciudad Real han quedado colgadas veinte familias que querían participar.