Desendeudamiento y mejora de la productividad frente a la “gigantesca burbuja de crédito” que arrastró España desde finales de los años 90 marcada por su introducción en la Zona Euro. Así de tajante ha sido el exministro de Industria y economista Miguel Sebastián a la hora de marcar los retos que tiene que afrontar la economía española durante su conferencia en las VIII Jornadas Empresariales de Manzanares.
La “varita mágica” para evitar esa nueva recesión que adelantan algunos analistas para la próxima década se traduce “apoyar a la industria en su proceso de innovación, formación e internacionalización” para cambiar el modelo productivo y proseguir con los esfuerzos de ahorro que han afrontado en los últimos años las familias, el sector público y las empresas.
Con un crecimiento anual del 2 por ciento del PIB, España es “la economía que más crece en Europa”. Sin embargo, “la productividad aumenta al 0 por ciento” y Miguel Sebastián ha afirmado que es la única garantía para “mejoras el empleo y los salarios, subir las pensiones y mantener el estado del bienestar”.
En gran parte ese crecimiento no deriva de méritos propios, sino de los “vientos de cola”. Sebastián ha hecho referencia a la bajada del precio del petróleo en este país con gran dependencia energética del exterior, al aumento de la competitividad a nivel internacional por la reducción del tipo de cambio y a la reducción de los tipos de interés debido a la compra de activos del Banco Central Europeo”.
Ahora bien, la enfermedad del lento crecimiento parece afectar a toda Europa y Miguel Sebastián ha apuntado que “tendremos que hacer algo porque si no tendremos Salvini u otros salvinis para rato”. Las estadísticas indican que, a pesar de que la caída del Lehman Brothers desató la crisis, a países como Estados Unidos desde entonces “no les ha ido tan mal”.
¿Fue un acierto entrar en la Zona Euro?
Preocupantes han sido muchas de las afirmaciones de Miguel Sebastián sobre los efectos de la entrada en la Zona Euro y que dieron lugar a la “falsa bonanza” entre 1999 y 2007 como consecuencia del aumento del crédito y el boom inmobiliario. Entre otras cuestiones, estuvo detrás de la caída del tejido industrial, básico para el desarrollo de la economía española.
Miguel Sebastián recuerda la polémica que generó en su momento el rechazo de Miguel Boyer en la Zona Euro y ha llegado a afirmar que España se “equivocó”. “¿Por qué Reino Unido o Suecia se negaron a entrar?”. El economista ha reconocido que los expertos se equivocaron al augurar que la economía sería más estable y crecería más, y ha comparado a la UE y a España con un “mal profesor” que le dice al “mal alumno” los temas que van a caer en el examen.
Ahora bien, lejos de ser antieuropeista, Miguel Sebastián ha reconocido que en la actualidad sería “un error salir”de la Zona Euro y ha afirmado que España tiene que contribuir a que la Unión Europea afronte las reformas necesarias y crezca.
Sobre el Brexit, Sebastián ha reconocido que no le acaba de disgustar, porque “los ingleses siempre han querido mantener su soberanía y con ellos no podríamos avanzar”. Incluso, ha animado a que otros hagan lo mismo, como Hungría o Polonia, y a que haya acuerdos comerciales.
Ahora bien, el exministro ha afirmado que le gustaría que los países que quedaran en la Zona Euro avanzaran en la construcción de los “Estados Unidos de Europa”. Como contrapunto, ha expresado que tiene dudas de su desarrollo, primero porque “no hay ningún líder europeo” y por el nacionalismo, “el mal del siglo”.
Dieciséis retos pendientes
Dieciséis retos pendientes figuran en la lista de Miguel Sebastián para la economía española, que al parecer el responsable económico de Podemos, Nacho Álvarez, comparte al 95% y Luis de Guindos del PP al 90%. El acuerdo con el PSOE podría garantizar reformas en educación, energía, sistema fiscal o industrial, aunque en el arco parlamentario parece no haber tanta sintonía.
Miguel Sebastián ha defendido un pacto de educación a largo plazo y consensuado, el fomento del espíritu emprendedor, la extensión de las nuevas tecnologías como oportunidad de futuro, el despliegue de energías renovables, las políticas de eficiencia energética y la inversión en I+D en la industria como motor del crecimiento económico, entre otras cuestiones.
En otro orden, Miguel Sebastián ha destacado este viernes la apuesta del Ayuntamiento por la política industrial a través de la celebración de estas jornadas que pueden servir de “herramienta para desatar el futuro emprendedor” y ha celebrado la gran respuesta entre los jóvenes.