«Los pueblos de Ciudad Real tienen un tamaño medio superior al de otras provincias, lo que facilita la gestión de las aguas residuales»

Fran Solís Toledo
El director-gerente de la Agencia del Agua, José Manuel Martín Aparicio, junto a Silvia Díaz del Fresno, directora-gerente de Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha, entidad de derecho público dependiente de la Agencia del Agua / JCCM

El director-gerente de la Agencia del Agua, José Manuel Martín Aparicio, junto a Silvia Díaz del Fresno, directora-gerente de Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha, entidad de derecho público dependiente de la Agencia del Agua / JCCM

El director-gerente de la Agencia del Agua, José Manuel Martín Aparicio, con motivo del Día Mundial del Agua, indica que el agua tiene una importancia “existencial para Castilla-La Mancha”, al tratarse de una región seca y que “no tiene acceso al mar, como otras regiones, que pueden obtener de ahí agua desalada”. A este respecto indica que el sector agroalimentario, “vital para la región, no es viable sin agua”, motivo por el cual considera que es necesario dedicar un día en el que el agua sea el centro de atención en Castilla-La Mancha. También analiza la gestión de los detritos en los pueblos más pequeños de la provincia y la importancia de las estaciones de aguas residuales en la región

Pregunta: ¿Cómo se gestionan los detritos en los pueblos más pequeños de la provincia para los que no es necesario tener una depuradora?

Respuesta: La Directiva Europea sobre el Tratamiento de Aguas residuales Urbanas (Directiva 91/271 CEE) establece la obligación de que los vertidos de aglomeraciones urbanas de menos de 2.000 habitantes equivalentes (h-e), que es la unidad de medida para calcular la carga de una depuradora, reciban un tratamiento adecuado cuando el vertido se realice en aguas dulces (ríos, arroyos…). A diferencia de lo que sucede con las aglomeraciones urbanas mayores de 2.000 h-e, la directiva no concreta en qué consiste ese tratamiento adecuado. En cualquier caso, la Directiva Marco del Agua (Directiva 2000/60/CE) exige a los estados miembros alcanzar el buen estado de las masas de agua.

La casuística en Castilla-La Mancha es muy variada, pues tenemos 919 municipios. Hay pueblos pequeños que cuentan con un sistema de depuración adecuado. La propia administración regional gestiona 143 depuradoras que dan servicio a municipios de menos de 2.000 h-e. En otros casos, se trata de una asignatura pendiente, aunque la concienciación ciudadana y política es cada vez más acusada ante la necesidad de que todas las aguas residuales sean objeto de tratamiento antes de su vertido.

P: ¿A partir de qué número de habitantes resulta obligatorio para una localidad de la provincia de Ciudad Real o de Castilla-La Mancha disponer de una depuradora?

R: Las directivas europeas establecen la obligación de tratar las aguas en todos los casos, salvo que el vertido no afecte a la calidad del medio receptor. Como es lógico, el grado de exigencia es mayor cuanto mayor es la aglomeración urbana o cuando el vertido se produce en zonas sensibles.

P: ¿Existe alguna población en la provincia que destaque o sea referente a la hora de retirar los agentes contaminantes sólidos y orgánicos del agua?

R: La provincia de Ciudad Real cuenta con una ventaja comparativa importante a este respecto. Sus poblaciones tienen un tamaño medio muy superior al de otras provincias, lo que facilita la gestión de las aguas residuales. Hay que tener en cuenta que el factor escala en materia de depuración es muy determinante en cuanto a su viabilidad técnica y económica.

Tenemos, por ejemplo, Valdepeñas, con una EDAR diseñada para 200.000 h-e, o Tomelloso, diseñada para 141.000 h-e, o la EDAR de Almagro-Bolaños de Calatrava, diseñada para 71.167 h-e. Todas ellas depurando y devolviendo el agua tratada al medio de acuerdo con los requisitos que establece la legislación.

Imagen de la EDAR de Tomelloso / JCCM

Imagen de la EDAR de Tomelloso / JCCM

P: ¿Qué supuso para Castilla-La Mancha la llegada de las depuradoras y de las estaciones de aguas residuales?

R: La importancia de la depuración de aguas residuales es absolutamente trascendental. El agua se ha convertido en un recurso muy escaso que hay que valorar en todas sus facetas. La preservación y mejora de nuestros ecosistemas está indisolublemente unida a ríos limpios. Por otra parte, la potencialidad económica de la reutilización es, ya no una opción, sino una obligación en un contexto de cambio climático y reducción de aportaciones de agua como el actual.

Castilla-La Mancha emprendió hace ya años este camino. El Gobierno regional gestiona 238 EDAR, que prestan servicio a 246 municipios. Y somos conscientes de que aún queda mucho trabajo por hacer, porque, como decíamos antes, tenemos 919 municipios en la región y más de 1.500 núcleos urbanos.

La determinación de este Gobierno es culminar el trabajo y para ello estamos ejecutando un plan de inversiones de más de 600 millones de euros que afectarán a más de 630 actuaciones para conseguir que, en aproximadamente 10 años, el 100% de las aguas residuales que se generan en Castilla-La Mancha vuelvan a los cauces depuradas y en las mejores condiciones.

P: ¿Qué políticas lleva a cabo el Gobierno regional para mejorar la calidad del agua?

Las políticas regionales destinadas a mejorar la calidad del agua se orientan hacia los tres ejes principales de la acción de gobierno en la materia: planificación, abastecimiento y depuración.

En materia de planificación, el gobierno regional defiende, como ha hecho siempre, los intereses hídricos de Castilla-La Mancha. Ya se trate de reducir los trasvases, de apoyar a los municipios ribereños, de mejorar la calidad del Tajo, de encontrar soluciones sostenibles para el regadío en el alto Guadiana, la Mancha Oriental o la cabecera del Segura, etc. La calidad del agua pasa necesariamente por disponer de más y mejores recursos, y en ello trabajamos a diario.

En materia de abastecimiento, la actuación del Gobierno regional se ejerce a través de la Agencia del Agua, organismo autónomo dependiente de la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural que dirige Francisco Martínez Arroyo, ya sea de forma directa o por medio de la entidad de derecho público Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha (IACLM). Esta entidad gestiona 8 sistemas de abastecimiento en alta, que prestan servicio a 178 municipios de la región, donde viven más de 450.000 personas. Suministra agua bruta, por ejemplo, en la Mancomunidad del río Algodor, a 45 municipios que abastecen a más de 158.000 habitantes.

Además de lo anterior, la Agencia del Agua ayuda a pequeños municipios de la región a mejorar sus sistemas de abastecimiento y saneamiento. Por medio de actuaciones, generalmente de pequeña envergadura, construimos nuevos depósitos, perforamos y equipamos sondeos, ampliamos y mejoramos manantiales, e instalamos nuevas conducciones. En esta legislatura hemos invertido en más de 120 actuaciones de esta naturaleza. Se trata de pequeñas inversiones, aunque enormes para los pequeños municipios donde se hacen, que tienen una enorme trascendencia para la mejora de la calidad de vida en el medio rural.

También en materia de abastecimiento, la llegada de los Fondos de Recuperación, Transformación y Resiliencia nos ha permitido contar con 10,88 millones de euros destinados a mejorar el abastecimiento y reducir las pérdidas en las redes de distribución. Han optado a esta ayuda numerosos ayuntamientos de Castilla-La Mancha.  139 pueblos han resultado adjudicatarios de la ayuda.

Por último, pero no menos importante, actuamos para mejorar la depuración, generalmente a través de la entidad pública IACLM. Ya hemos construido numerosas depuradoras y actualmente gestionamos 238 EDAR que prestan servicio en 246 municipios, en los que viven cerca de 490.000 personas. Como ya he dicho anteriormente, aún nos queda mucho trabajo por hacer, pero la mejora integral del tratamiento de nuestras aguas residuales es sin duda una prioridad absoluta del Gobierno regional que preside Emiliano García-Page.

P: El Gobierno de Castilla-La Mancha invierte actualmente 66 millones de euros en la construcción de 16 Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR) repartidas por todo el territorio. ¿Significa esto que la Junta muestra su compromiso para que no quede ni una sola gota de agua sin depurar?

R: Así es. Actualmente estamos ejecutando o tenemos en licitación 19 EDAR, que suman un presupuesto aproximado de 70 millones de euros. Se trata de un presupuesto ambicioso que pone de manifiesto el compromiso de este Gobierno. También ayuda a este esfuerzo los 15,9 millones de euros que han llegado a nuestra región para este fin con cargo a los Fondos de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

Nuestro compromiso es que el 100% de las aguas residuales de la región se viertan al medio en condiciones adecuadas, con arreglo a la normativa nacional y europea en la materia. Para ello es necesario un esfuerzo inversor enorme, en el que estamos comprometidos.

P: ¿Qué importancia tiene para Castilla-La Mancha y para Ciudad Real el Día Mundial del Agua?

R: La nuestra es una región seca. Esto no es una opinión, es un hecho. La importancia del agua es existencial para Castilla-La Mancha. Nosotros no tenemos acceso al mar, como otras regiones, que pueden obtener de ahí agua desalada. Por otra parte, el sector agroalimentario, vital para nuestra región, no es viable sin agua. Por eso es importantísimo dedicar un día en el que el agua sea el centro de atención en Castilla-La Mancha, un día de celebración y también de reivindicación. El agua tiene que servirnos, entre otras cosas, para unirnos, para que desde Castilla-La Mancha exista una única voz que defienda los intereses de la región.

El director-gerente de la Agencia del Agua, José Manuel Martín Aparicio / JCCM

El director-gerente de la Agencia del Agua, José Manuel Martín Aparicio / JCCM

P: ¿Es necesario concienciar a la población sobre un correcto uso de la misma y de no malgastarla y tener reservas para cuando vengan épocas de menos lluvias o sequías?

R: Por supuesto. Como se ha dicho, la escasez creciente del recurso es algo que está más allá de nuestro control, es algo que tenemos que conllevar y gestionar. La optimización en el uso del recurso no es una opción sino una absoluta necesidad.

En lo que se refiere a las reservas, la situación central de nuestra región en España ha convertido a Castilla-La Mancha en un gran reservorio de agua. Esto es especialmente relevante en las cuencas del Tajo, Júcar y Segura cuando hablamos de agua superficial; y en las del Guadiana, y también el Júcar, cuando nos referimos a aguas subterráneas. Como sabemos, tradicionalmente esa agua embalsada se ha empleado mayoritariamente aguas abajo de nuestra región, en zonas más ricas y pobladas, incluso forzando artificialmente que el alto Tajo desagüe la mitad de sus recursos al Segura. Por estas razones, el Gobierno regional, desde hace años, ha reivindicado que las primeras necesidades que hay que satisfacer son las del territorio donde se encuentra el agua.

P: ¿Cómo se encuentra, en general, el abastecimiento de agua en la provincia de Ciudad Real? ¿Cree que puede haber problemas en el futuro?

R: La provincia de Ciudad Real cuenta con un as en la manga, un activo fundamental en materia de abastecimiento que está a punto de desplegar su funcionalidad. Se trata del Sistema de Abastecimiento a la Llanura Manchega o Tubería Manchega, una infraestructura en la que se han invertido cientos de millones de euros de dinero público y que hasta ahora estaban enterrados sin usarse. Vamos a iniciar en breve la explotación del sistema con los primeros municipios que han suscrito los convenios en el primer ramal del sistema, el nororiental, en el que dos municipios de Ciudad Real, Pedro Muñoz y Socuéllamos, van a poder empezar a recibir agua para consumo urbano, es decir, para beber, muy pronto. El presidente García-Page va a inaugurar este ramal el próximo 29 de marzo. Confiamos en que, en un futuro próximo, la Tubería a la Llanura Manchega proporcione agua para gran parte de la provincia, lo que favorecerá el desarrollo de la provincia.

P: El agua es un factor decisivo para los objetivos de Desarrollo Sostenible y para la salud y prosperidad de las personas y el planeta. ¿Considera que es una cuestión lo suficientemente importante para que los países del mundo se pongan de acuerdo sobre esta materia?

R: Al igual que sucede en España, el agua en el mundo está repartida de manera muy desigual. Es muy frecuente que los lugares con más agua sean los menos poblados y viceversa. El acceso al agua ha provocado y, por desgracia, seguirá provocando conflictos en aquellas zonas más estresadas climáticamente por las que discurren ríos compartidos.

Afortunadamente, la tecnología en relación con el tratamiento de agua no ha dejado de innovar y cada vez es más factible que el ciclo del agua sea una realidad, no sólo a gran escala sino a pequeña escala. Es decir, que cada gota de agua tenga no una sino varias vidas.

Somos agua y sin agua la vida no es posible. Por tanto, no nos queda más remedio que ponernos de acuerdo en cuanto a la manera de repartirla y de utilizarla de forma racional y sostenible.