Miguelturra, Socuéllamos y Tomelloso han sido las únicas localidades de la provincia de Ciudad Real con más de 10.000 habitantes que han ganado población durante el último año, según se desprende de los datos estadísticos del INE y a los que ha tenido acceso Lanzadigital. Y es que durante los últimos 365 días, 9 de las 12 localidades que se ajustan a los criterios analizados han perdido habitantes.
Siguiendo la tónica de los últimos tiempos, Miguelturra, ha ganado 86 habitantes durante el último año. De hecho, en 2021 esta localidad tenía 15.658 habitantes empadronados, por los 15.744 que figuran a principios de 2022.
Significativo ha sido también el aumento de población que se ha producido en Tomelloso, municipio que ha ganado 40 habitantes durante el periodo analizado. (35.984 habitantes en 2021 frente a 36.024 habitantes en 2022).
En Socuéllamos el padrón municipal de 2022 ha experimentado un incremento de 31 personas respecto al año anterior, tras registrar a finales de diciembre del pasado año 12.098 habitantes.
Pese a estos tres incrementos, la tónica general en el conjunto de la provincia de Ciudad Real ha sido la pérdida de habitantes en la mayoría de los municipios con más de 10.000 habitantes.
En Bolaños de Calatrava la merma de población ha sido de 82 personas en el padrón municipal, (11.992 habitantes en 2021 frente a 11.910 habitantes en 2022), mientras que el descenso en Manzanares la pérdida ha sido de 107 habitantes (17.738 habitantes en 2021 frente a 17.845 habitantes en 2022).
Otras de las localidades que han perdido algo de población durante los últimos 365 días y que podrían encontrarse en una situación parecida a las dos anteriores son Alcázar de San Juan (-32 habitantes) tras pasar de 30.548 habitantes en 2021 a 30.516 habitantes en 2022); Campo de Criptana (-87 habitantes) tras registrar 13.142 habitantes en 2022 frente a 13.229 que tenía en 2021) y La Solana (-44 habitantes) tras contabilizar a principios del pasado año 15.313 habitantes.
Por su parte, Ciudad Real capital ha perdido 254 habitantes durante el periodo señalado, tras pasar de los 75.104 que tenía censados en el año 2021 a los 74.850 censados en 2022, según los datos oficiales del INE.
Entre los pueblos mayores de 10.000 habitantes de la provincia que durante los últimos 365 días han perdido habitantes también se encuentran Daimiel, municipio que ha perdido 91 habitantes durante el periodo anteriormente señalado (17.771 habitantes en 2021 frente a 17.680 habitantes en 2022), y Valdepeñas, que en el último año ha experimentado una merma de 147 personas censadas (30.218 habitantes en 2021 frente a 30.071 habitantes en 2022).
Perdida de casi de 500 habitantes
Durante el periodo analizado tomando como base las cifras del Instituto Nacional de Estadística, el descenso más significativo de habitantes entre las grandes localidades de la provincia, desde el punto de vista numérico, se ha producido en Puertollano con una merma de casi 500 habitantes, en concreto 497 (46.036 habitantes en 2021 frente a 45.539 habitantes en 2022).
Analizando los datos a nivel provincial, Ciudad Real en su conjunto ha perdido 1.785 habitantes, debido a que actualmente cuenta con 490.806 habitantes, mientras que a finales de 2021 tenía 492.591.
