Entre los puntos a votar en el Orden del día venía la modificación del Reglamento del Consejo de Salud, un órgano consultivo y participativo en el que las asociaciones y colectivos sectoriales del ámbito de la salud, junto con los grupos políticos con representación municipal, pueden proponer y llevar a cabo diferentes actividades y propuestas, indicó en un comunicado el grupo IU-Podemos.
En virtud de lo indicado por los servicios técnicos, el Reglamento tenía que ser modificado al existir una cuestión que lo convertía en nulo de pleno derecho, ya que se indicaba que las modificaciones del mismo se hacían en el propio Consejo en lugar del Pleno, instancia competente para ello.
Para sorpresa del grupo IU-Podemos, esta modificación incluía una “puñalada trapera” y un ataque directo a las labores de la oposición, ya que pretendía limitar la labor de los grupos de la oposición en dicho Consejo al no poder llevar a cabo las propuestas que presentasen los diferentes grupos, ya que, según el concejal, pueden proponer lo que quiera teniendo voz, pero luego lo llevaría a cabo el consejo sin el propio grupo municipal.
Esto claramente es “una represalia por las jornadas que realizó el grupo socialista hace unos meses sobre el suicidio y las conductas autolíticas, ya que fue una propuesta que presentaron y que se llevó a cabo en el seno del Consejo, por lo que, al ver el éxito que tuvo, no puede consentir que se siguieran realizando estas actividades por parte de la oposición”.
“Esto tiene un objetivo claro, invisibilizar las labores de oposición y centrar la atención en el concejal de Salud en las diferentes actividades que se realizasen en el Consejo”, señaló IU-Podemos.
“Resulta paradójico cuando desde el equipo de Gobierno se nos critica que no somos colaborativos y propositivos cuando llevamos toda la legislatura presentando enmiendas, mociones y demás, y ahora que el PSOE también propone actos interesantes como el mencionado, se nos ataca frontalmente como represalia para que no volvamos a realizar dichos actos”.
Todo esto acompañado de “una prepotencia, una chulería y una condescendencia impropia del cargo de un concejal hacia el resto de compañeros y compañeras de corporación, ya que daba a entender que los grupos de la oposición están en el Pleno con la mano puesta con el cestillo como en la Iglesia para cobrar sin más mientras ellos están ahí por amor al arte, cuando están todos liberados y cobrando lo mismo, en un ataque demagógico hacia las personas liberadas de la oposición”, resaltó IU-Podemos.
Por último, “desde nuestro grupo queremos indicar que siempre hemos tenido la deferencia de presentar nuestras propuestas y medidas con tiempo suficiente para que los técnicos puedan realizar la valoración, pero que en la práctica da igual porque no llegan a las comisiones o directamente se nos quiere limitar y callar en la actuación municipal como ya hemos visto en el Consejo de Salud, cuando en el resto de Consejos se podrá seguir participando como siempre”, agregó.
“La enmienda en relación al Reglamento se presentó la misma mañana del Pleno al darnos cuenta de las intenciones oscuras que tenía dicho Reglamento, puesto que nuestra labor como oposición no sólo es proponer medidas que mejoren la vida de la ciudadanía, es también controlar y fiscalizar la labor del equipo de gobierno, por ello revisamos lo que se va a aprobar y lo que se ha aprobado por si existiera algún error o se pudiera mejorar dichas propuestas”, señaló IU-Podemos, que subrayó que “Miguelturra no se merece un concejal con esos aires de grandeza ni esa actitud autoritaria con el resto de grupos de la oposición (ni personas en general)”.