Los cuatro autobuses del servicio especial, desde las ocho y media de la tarde hasta la una y media de la madrugada, llevan a numerosos jóvenes de Ciudad Real a Miguelturra para sumarse a la fiesta carnavalera.

Una larguísima cola de pasajeros se extiende en la parada de ‘la viajera’ en la Plaza de San Francisco para transportar a nuevos participantes a una multitudinaria celebración que no achica el frío ni las ‘cuatro gotas’ que están cayendo en este inicio del mes de marzo.

Repleto el parque Doctor Fleming de adolescentes y jóvenes ataviados de mil y una caracterizaciones, la calle Carnaval, en dirección al mercado y desde la plaza del Ayuntamiento, también concentra a numerosas máscaras callejeras disfrutando de la música pinchada en carritos y stands decorados para la ocasión y algunos hasta con barbacoa.

Todas las profesiones y el Arca de Noé, así como cualquier objeto y personaje del cine, la historia y la actualidad son susceptibles de reencontrarse en un jocoso festín de mutaciones y cambio de identidades.

De cuatro y media de la madrugada a ocho y media de la mañana, el servicio de autobuses llevará de retorno a Ciudad Real a muchos de los asistentes al Carnaval de Miguelturra.



