En este punto, se han colocado unas letras grandes que conforman el nombre de Miguelturra realizadas, para dar la bienvenida a la localidad a todos los viajeros, por los alumnos y alumnas del programa de Recualificación y Reciclaje Profesional en torno a la soldadura con electrodo revestido y TIC. En concreto, se trata de un trabajo fin de programa de los ocho alumnos: seis mujeres y dos hombres, y que ha sido diseñado por uno de esos alumnos: Marino Muñoz.
En esta visita, a la que además de los alumnos y su formador, acudieron el concejal de Promoción Económica, Miguel Ángel García, y parte de la Corporación Municipal, el alcalde de la localidad explicó que “hay que poner en valor, por un lado, y agradecer, por el otro, a los alumnos este taller de recualificación de soldadura que han estado prestando su servicio y trabajando, porque lo que han hecho es trabajar y aprender al mismo tiempo en nuestro municipio durante estos últimos seis meses”.
Un trabajo que “va a quedar para la posteridad y que será recordado por todos los miguelturreños cuando llegan a su pueblo, y también por los hombres y mujeres que han trabajado en este taller de recualificación y que dan visibilidad a Miguelturra”, finalizó el alcalde.
Por su parte, el edil de Promoción Económica explicó que estos talleres de recualificación se iniciaron en 2016, en la Legislatura de Victoria Sobrino como alcaldesa y de Miguel Fernández como concejal, “por lo que desde aquí también hay un reconocimiento para ellos en estos momentos”.
En este caso ha sido el programa de Formación y de Empleo de Soldadura TIC, que después seis meses ha concluido “y, tras el cual, anunciamos que se iniciará otro de albañilería, lo que supone que Miguelturra siga creciendo y sigamos dando esa oportunidad a la gente que quiera formarse y cambiar de sector profesional”, aseguró el edil, quien añadió que, “en realidad, este es el objetivo de cualquier formación para el empleo, que los alumnos con la formación que han conseguido aquí durante estos seis meses puedan llamar a la puerta de cualquier empresa y empezar a trabajar como si llevasen mucho tiempo trabajando en el sector”.
Respecto a estas letras que han sido inauguradas, García informó que “tanto el colectivo de personas que han formado parte de este taller Recual, como el monitor, querían hacer algo más para dejar su huella en el pueblo, y de ahí la idea conjunta de todos de utilizar una rotonda para dotarla con la imagen de Miguelturra”. “Así quedará para el futuro y cualquier persona que entre por la zona este de Miguelturra podrá encontrarse el nombre de la población, junto con la entrada principal de la calle Real, aunque en este caso el nombre de Miguelturra está diseñado con setos y solo se ve bien desde arriba”.
Miguel Ángel García finalizó destacando que “este proyecto es un reflejo del trabajo bien hecho y de la formación que han obtenido estos alumnos” y deseó que “el empleo se haga una realidad para estos alumnos y alumnas, y que puedan empezar a trabajar en este sector utilizando la formación recibida durante los últimos seis meses”.