Más de un millar de personas han esperado a Nuestra Señora la Virgen de las Cruces a su llegada a Daimiel. Sobre las 9.20 horas de este domingo llegaba a la Cruz de los Pajes, portada a hombros por 52 mozos que la han traído corriendo desde el Santuario en un total de 13 relevos. En este punto, varios han sido los devotos que se han acercado para contemplar la imagen o besar la hornacina que la protege, todo ello al son del himno de la patrona y de cohetes.
Tras un breve descanso, los mozos y un buen número de fieles han continuado el camino en procesión para llegar minutos después a la ermita del Cristo de la Luz. La Banda Municipal de Música ha iniciado el desfile, seguida de los hermanos mayores de este año y de las autoridades municipales y religiosas que custodiaban la imagen. Entre ellas, el alcalde de Daimiel, Leopoldo Sierra y el presidente de la hermandad, Paulino García de la Camacha.
Los mozos estrenan camisetas azules
Como novedad, los mozos han estrenado una camiseta azul y chaqueta cortavientos que los identificaban como tal, donadas por cuatro empresas locales. Junto a ellos, se ha podido ver a algunos de los novicios de la congregación pasionista que también han colaborado en la tarea de traer la imagen desde el Santuario, situado a unos 12 kilómetros de la localidad.
Multitudinaria acogida, propiciada por una mañana soleada y con temperaturas agradables. La patrona de Daimiel permanecerá en la localidad hasta el 20 de mayo, día en el que bien temprano regresará a la ermita de Las Cruces para celebrar la Romería de Pentecostés.
