Mediante una charla informativa de prevención y promoción, impartida en la Casa de la Ciudad para prevenir la Sensibilidad Química Múltiple, los alumnos han explicado cuáles son los síntomas de esta enfermedad y han aportado consejos para poder sobrellevarla mejor.
Así lo ha dado a conocer a Lanza, Elisa Caro, que es una de las personas encargadas de dirigir este grupo de gente joven comprometida y que, mediante una iniciativa completamente altruista, se preocupa por mejorar la vida de las personas que padecen Sensibilidad Química Múltiple.
Caro explica que el motivo de la charla surgió de un proyecto de la Universidad: “En clase nos habían mencionado estas enfermedades, pero nunca habían profundizado en ello. Y, como nos resultó tan curioso, quisimos indagar más”.
Recuerda como la Sensibilidad Química Múltiple es una enfermedad crónica en la que las personas que se ven afectadas por esta patología muestran intolerancia ante determinados productos que están en el medio 07ambiente, entre ellos los químicos, pudiendo reaccionar negativamente “tanto de forma digestiva, respiratoria o mediante un cansancio físico o mental”.
Durante la charla los estudiantes han explicado a los asistentes en qué consiste este tipo de enfermedad, tratando posteriormente la sintomatología, debido a que no tiene cura.
De esta manera, los estudiantes de Fisioterapia ayudarán a aquellas personas que padezcan Sensibilidad Química Múltiple “dándoles un masaje si sienten mucho cansancio, o bien les recomendarán autoestiramientos, ya que estos pacientes suelen pasar mucho tiempo en la cama o sentados, por lo que los músculos tienen que acortarse, para lo cual también les vamos a dar consejos posturales”, aclara Elisa Caro.
Asimismo, apunta que en los días venideros el grupo de estudiantes realizará dos sesiones un poco más específicas para saber qué necesita cada una de las personas que padece sensibilidad química múltiple, que “suele tener una mayor prevalencia entre las mujeres, pudiendo originarse en la edad pediátrica y en la geriátrica”.
La presidenta de la Asociación Regional de la Asociación SFC-SQM, Carmen Lozano, ha valorado muy positivamente el hecho de que los propios estudiantes de la Facultad de Fisioterapia se hayan implicado en este proyecto: “Para nosotros supone un gran paso, pues el hecho de que unos estudiantes, sin conocernos de nada, llamen a la puerta, es un honor”.
Explica que para los socios de la Asociación de la Sensibilidad Química Múltiple este tipo de terapias “nos viene muy bien”, puesto que “hacen mucha falta a las personas que apenas tienen movilidad”.
En este sentido ha puesto en valor la importancia que la fisioterapia tiene para este tipo de pacientes, al señalar que en el caso de la encefalomelitis o el síndrome de fatiga cónica “los enfermos apenas pueden moverse, porque están en cama y pueden realizar poco ejercicio, motivo por el cual creo que esta actividad nos va a aportar mucho”.
Lozano recuerda que ahora mismo puede haber del orden de cien pacientes dentro de la asociación en Castilla-La Mancha, de los que unos 35 pertenecen a la provincia de Ciudad Real.
Por último relata lo mucho que le ha cambiado la vida desde le diagnosticaron Sensibilidad Química Múltiple pues “pasas de vivir en un mundo rodeada de química dentro de mi profesión como peluquera a que, de la noche a la mañana, tener que estar encerrada cuando me diagnosticaron la enfermedad. Y eso hizo que me cambiase la vida radicalmente pues tuve que renunciar a mi profesión, a mi trabajo y a mi vida. Hasta que lo aceptas puedes estar un tiempo. Pero llega un momento en el que dices que esa no es la vida que quieres. y, a partir de ahí, empiezas a asimilarlo y a luchar”.